La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) informó a la Procuraduría General de la República (PGR) que los 25 millones de pesos en efectivo que fueron decomisados en el aeropuerto internacional de Toluca, estado de México, a dos empleados del gobierno de Veracruz fueron dispuestos de cuentas del gobierno del estado. Según el reporte, no existen indicios de que los recursos sean de procedencia ilícita, revelaron mandos de la institución que dirige Marisela Morales Ibáñez.

El gobierno de Veracruz se encuentra en espera de que la PGR le devuelva los 25 millones de pesos incautados el 27 de enero pasado, ya que la licitud de los recursos ha sido acreditada, tanto su origen como destino, por la administración estatal y la propia autoridad federal reconoció el trámite, aseveró el mandatario Javier Duarte de Ochoa, quien apremió a que le devuelvan los fondos, los cuales serán ocupados para finiquitar el pago por los actos artísticos para las festividades locales, entre ellas la fiesta de la Candelaria en Tlacotalpan, el carnaval –que ya se inició el martes anterior– y el festival cumbre Tajín, que se realizará en la tercera semana de marzo.

La SIEDO continúa investigando

El dinero continúa en poder del Ministerio Público Federal. La Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Siedo) todavía sigue la pesquisa, aunque los recursos podrían ser devueltos la semana próxima al gobierno de Veracruz.

Ayer, el mandatario veracruzano declaró que (el dinero) era para saldar una obligación contraída que tenemos con un proveedor. Hemos hablando con él para que nos siga aguantando el pago, porque el recurso está retenido. Como se ha venido comentando, el gobierno (local) ha acreditado el origen lícito de los recursos y también el destino. Espero que ello se resuelva pronto y no se politice, comentó Duarte de Ochoa en una entrevista realizada durante un recorrido por planteles educativos de la ciudad.

Lo anterior en referencia a la denuncia que el senador veracruzano Juan Bueno Torio interpuso la víspera ante la PGR por el traslado de los 25 millones de pesos en efectivo. Ante ello, Duarte de Ochoa consideró que, dado el contexto electoral, no se puede evitar que el caso se vea inmerso en cuestiones políticas, aunque en realidad se trate de un asunto financiero-legal.

Son 25 millones de pesos, recursos importantes de la inversión y, sobre todo, de la derrama económica. Con los millones invertidos en promocionar las fiestas hemos recibido a cambio millones de pesos más que benefician a miles de veracruzanos. Es una inversión, más que un gasto, enfatizó.

El mandatario veracruzano subrayó que, a pesar de que dichos fondos siguen retenidos, la promoción turística no ha sido detenida.

Independientemente de que se deba al proveedor esa cantidad, la promoción y, sobre todo, la participación de esa empresa en las fiestas que hemos venido impulsando se ha llevado a cabo puntualmente, agregó en referencia a la empresa Industria 3 SA, la cual reconoció tener un contrato con el gobierno estatal para la prestación de servicios en el rubro artístico-musical para las festividades mencionadas.

Duarte de Ochoa recordó que la fiesta de la Candelaria en Tlacotalpan se realizó de manera satisfactoria, al igual que el carnaval de Veracruz. Ambos, añadió, con saldo blanco y sin menguar la promoción turística ni la calidad de los actos.

Lo pendiente, insistió, es solamente lo que debemos. No hemos podido pagar esa cantidad; sin embargo, los asistentes a las fiestas han sido testigos de la fuerza que hemos impreso. La Candelaria fue un éxito, pues asistieron más de 70 mil personas en Tlacotalpan.