La Iglesia de la Luz del Mundo y Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) coincidieron en que la reforma aprobada por los diputados al artículo 24 constitucional debe ser ampliamente discutida en el Senado antes de que los legisladores se pronuncien al respecto, ya que existe el riesgo de un gradual desmantelamiento del Estado laico al haber una interpretación sesgada de la libertad religiosa.

En entrevista, Eliezer Gutiérrez Avelar, titular de comunicación de la primera asociación citada, indicó que esperamos que [en el] Senado pueda debatirse más ampliamente, se invite a actores sociales y especialistas en el tema. Además, dicha cámara debería ver la pertinencia de elevar a rango constitucional la laicidad del Estado [...] para que de una vez se establezca que la República Mexicana es laica.

Expuso que a la Luz del Mundo nos preocupa de manera extraordiaria esta reforma, porque vemos que en el fondo prevalece una manipulación del término de libertad religiosa a efecto de sustentar priviliegios y no de ampliar libertades. Añadió que, aunque en dicha confesión por supuesto que estamos de acuerdo con la libertad religiosa, pues es un derecho humano fundamental, no estamos de acuerdo con que se utilice un término tan noble para que se haga una interpretación sesgada y maliciosa, y se manipule para obtener privilegios que no convienen a nadie.

Consuelo Mejía, directora de CDD indicó que el riesgo es que se tome de punto de partida cómo entiende la jerarquía católica conservadora el término libertad religiosa y así hacer posible que se abran las puertas a la intervención eclesiástica en las políticas públicas.

Criticó que la reforma se haya concretado con un albazo y un cúmulo de irregularidades. Confió en que en el Senado no ocurra lo mismo ni prevalezca el pragmatismo político que está por encima de cualquier principio ético de defensa de la democracia y de la laicidad, como en San Lázaro.

Aparte, Josué Tinoco Amador, experto en relaciones Iglesia-Estado y catedrático de la UAM-Iztapalapa, indicó que pese a que la minuta en la redacción no se ve tan grave, en la parte práctica se le está dando el espacio de poder o la permisividad de interpetación a cierto sector de la jerarquía católica.

En ese sentido México se va encaminando al reconocimiento de una sola forma de pensamiento religioso, a dejar el laicismo por una forma de pensamiento autoritario, y eso es grave; con esta reforma no se permite el reconocimiento equitativo a las diferentes formas de sentir religioso o de quienes no lo tienen.