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Para adelgazar el gobierno, continúa la política de austeridad

Cuba eliminó sólo 10% del millón de empleos que planea desaparecer
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Imagen de archivo de estudiantes cubanos de la educación básica que se dirigen a sus escuelas en un suburbio de La HabanaFoto Ap
Corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 28 de octubre de 2011, p. 27

La Habana, 27 de octubre. Cuba eliminará el Ministerio de la Industria Sideromecánica (Sime) y convertirá el de Industria Básica (Minbas) en una cartera de Energía, en un nuevo paso para adelgazar el gobierno y separarlo del control directo de las empresas públicas, de acuerdo con fuentes informadas.

Sin embargo la reducción del organigrama aún no equivale a una reducción de puestos de trabajo en gran escala, pues del millón de plazas que el gobierno se propuso eliminar este año, sólo ha desaparecido algo más de 10 por ciento, dijeron las fuentes a La Jornada.

El Sime seguirá el camino del desaparecido Ministerio del Azúcar, al convertirse en un holding empresarial con gestión propia, de acuerdo con las versiones. El nuevo Ministerio de Energía será la cabeza de sector de la Unión Cuba Petróleo (Cupet) y la Unión Eléctrica (Une), los conglomerados estatales a cargo de sus respectivas industrias.

No queda claro qué pasará con otras áreas que hasta ahora maneja el Minbas, como la química, el cemento, el vidrio y el papel, así como la minería, que incluye la extracción de níquel, principal producto de exportación.

En el Ministerio de la Industria Alimenticia (Minal) se está ejecutando el traspaso de funciones de su sector productivo a un grupo empresarial, informó esta semana el diario Juventud Rebelde.

La reducción del aparato del gobierno es la segunda de grandes proporciones que emprende Cuba durante 17 años. El intento anterior fue en 1994, cuando la crisis económica obligó a las autoridades a desmantelar una estructura de corte soviético, de abundantes dependencias y liderazgos colectivos, para crear un gabinete de estilo occidental.

El recorte entonces fue limitado. Este segundo intento se realiza con lentitud, pues el primer anuncio lo hizo el presidente Raúl Castro en febrero de 2008.

De 28 ministerios que había en 1994, ahora quedan 22, además del Banco Central, que tiene ese rango, y los institutos de aeronáutica, deportes y radio y televisión, que son cabezas de sector. En 2009 se creó la Contraloría General de la República, con autoridad por encima del gobierno.

Castro advirtió en 2009 que debían eliminarse más de un millón de plazas para sanear las finanzas públicas, elevar la productividad del trabajo y fortalecer el salario. El año pasado las empresas recibieron un cronograma para el recorte, que terminaría en marzo de 2011. Sin embargo el calendario se alargó en la práctica y el gobierno reconoció que era necesario reducir el ritmo.

Esta es la segunda ocasión en dos décadas que el gobierno intenta desinflar el exceso de personal. La anterior fue a finales de los años 80, cuando el Partido Comunista lanzó una campaña llamada de rectificación de errores y tendencias negativas. Pero la campaña entró en un laberinto de discusiones y después irrumpió la crisis de los 90, que modificó de golpe todos los planes.

El Sime controla empresas en las ramas de hierro y acero, aluminio, bicicletas y motocicletas, autopartes, equipamiento agrícola, mobiliario y equipo médico, maquinaria, refrigeradores y calentadores, ingeniería industrial y envases, entre otras.

El Cupet dirige la extracción en tierra, la exploración en aguas profundas y la refinación. La Une es la principal generadora de electricidad, que también se produce en la industria azucarera y en una planta que recicla gas acompañante del crudo.

Las empresas del Minal producen bebidas y refrescos, además de alimentos procesados como lácteos, confituras, carnes, aceites, grasas, conservas, vegetales y harinas. En estos tres sectores hay inversión extranjera.

Según datos provisionales, en 2010 Cuba exportó 3 mil 900 millones de dólares en bienes, pero tuvo que importar más del doble, 8 mil 500 millones de dólares.

La isla reduce el desequilibrio de su balanza de pagos con la venta de servicios. Los principales productos de exportación, luego del níquel, son los medicamentos y los refinados del petróleo, y las mayores compras son de crudo y alimentos.