Política
Ver día anteriorMiércoles 10 de agosto de 2011Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El galardón Alison des Forges se entrega a quienes en su labor ponen en riesgo su vida

Premia HRW a activista de Nuevo León por su valor en defensa de los derechos humanos

Es una bocanada de aire fresco en momentos en que el ambiente está enrarecido: Consuelo Morales

 
Periódico La Jornada
Miércoles 10 de agosto de 2011, p. 21

La directora de la asociación civil Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos (Cadhac), Consuelo Morales Elizondo, se hizo acreedora al Premio Alison des Forges por su activismo extraordinario, el galardón más importante que otorga Human Rights Watch, en reconocimiento a la labor que desde hace 18 años realiza dicho colectivo en defensa de las garantías individuales.

Dicho premio es entregado anualmente a activistas que han puesto en riesgo su seguridad y su vida en pro de los derechos humanos; en esta ocasión fue otorgado también a Hossam Bahgat, de Egipto; Sihem Bensedrine, de Túnez; Anis Hidayah, de Indonesia; Farai Maguwu, de Zimbaue; Elena Milashina, de Rusia, y Sussan Tahmasebi, de Irán.

Cadhac, fundada el 23 de abril de 1993, tiene su sede en Monterrey, Nuevo León, y fue creada por comunidades eclesiales de base que se dedican a la defensa y promoción de los derechos humanos, con respeto a la pluralidad de credos, ideologías y preferencias sexuales.

En entrevista telefónica con La Jornada, Morales se congratuló por el reconocimiento, el cual atribuyó a la buena labor que han realizado los integrantes del colectivo en defensa de la democracia y la fraternidad.

Estamos muy contentos; (el premio) representa una bocanada de aire fresco en momentos en que el ambiente está muy enrarecido. Nos permitirá destacar el drama nacional y local de las desapariciones forzadas, y el de la impunidad y la corrupción, que se ha vuelto complejo por la delincuencia organizada, afirmó la religiosa.

Uno de los principales riesgos que implica esta situación –advirtió– es que, en vez de diseñar estrategias de seguridad que apuesten por la reconstrucción del tejido social, el gobierno opta cada vez más por aplicar políticas de mano dura que ya han demostrado su ineficacia.

Hacen más pesadas las condenas y empiezan a meter gente a la cárcel por delitos supuestamente graves, que en realidad no lo son. Hace 15 días publicaron en Nuevo León una reforma para castigar con 50 años de prisión el robo de auto con violencia. No protegen a los niños y a las mujeres, pero sí los vehículos, y lo que hay que hacer es poner en el centro a las personas, afirmó.

Con el pretexto de la inseguridad –continuó– se ha divulgado la idea de que los presuntos delincuentes pueden ser eliminados físicamente. El incremento de la violencia es tal, que cada vez se habla más de la tentación de aplicar la pena de muerte y reducir la edad penal, pero el camino es que nos reconozcamos como hermanos y pongamos a la gente en el centro de nuestra atención.

Por ello, Morales se pronunció en favor de las iniciativas de seguridad dadas a conocer el pasado lunes por un grupo de especialistas e investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ya que es urgente buscar alternativas para cambiar la actual estrategia del gobierno federal.

Ya está comprobado que el endurecimiento de las penas no inhibe la delincuencia. Si les quitamos la oportunidad de educarse y de jugar, ¿qué jóvenes queremos? Se los lleva el Ejército, la Marina o la delincuencia organizada, y en vez de evitarlo, la autoridad está permitiendo más impunidad y corrupción, lamentó la activista.