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Los millonarios, a punto de jugar la promoción del descenso

Boca Juniors hunde a River Plate al ganar 2-0 el clásico

Palermo anotó su último tanto ante el archirrival en La Bombonera

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Martín Palermo, goleador histórico xeneize, festeja su anotación en La BomboneraFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Lunes 16 de mayo de 2011, p. 4

Buenos Aires, 15 de mayo. Boca Juniors venció 2-0 a un débil River Plate, que quedó comprometido con el descenso tras la derrota en La Bombonera, donde Martín Palermo anotó un tanto en su último superclásico del futbol argentino, ya que en junio se retirará.

El primer gol fue en contra: el arquero de los millonarios, Juan Pablo Carrizo, metió la pelota en su propio arco luego de un córner. Sobre el final, fueron expulsados Clemente Rodríguez, por el local, y Matías Almeyda, por el visitante.

Los hinchas de Boca deliraron con la victoria que dejó al equipo de Julio Falcioni a seis puntos de Vélez, el único líder, que perdió 2-3 ante Lanús, además que River quedó en una difícil situación de cara a la promoción al descenso, cuando restan cinco fechas para que finalice el torneo Clausura.

Y ya lo ve, y ya lo ve, el que no salta, se va a la B, cantaron los jugadores xeneizes al final, mientras saltaban abrazados en el centro del campo.

Los clásicos hay que ganarlos. Boca jugó muy concentrado y se quedó merecidamente con el triunfo, sintetizó Falcioni.

El partido fue parejo en el comienzo. Se jugó mayormente en el mediocampo, donde hubo varios roces en un desarrollo deslucido. Tras algunas insinuaciones de ambos equipos, River parecía con mayor decisión para buscar el arco rival.

A los 24 minutos Mariano Pavone estuvo cerca de convertir, pero Matías Caruzzo llegó justo para evitar el remate del delantero de River.

En la siguiente jugada, Pablo Mouche corrió por una pelota que parecía intrascendente y consiguió un córner para Boca, que hasta entonces no había generado peligro. La jugada fue clave, porque Riquelme envió un centro que fue apenas desviado por Luciano Monzón y terminó en gol en contra de Carrizo, cuando iban 27 minutos.

El arquero millonario no tenía consuelo y Boca ganó confianza. Fueron tres minutos fatales para River y fundamentales para el local.

Enseguida, a los 30, se encontró con el 2-0. Tras un rebote, Palermo apareció solo en el área y definió sutilmente de cabeza por encima de Carrizo, quien quedó a mitad de camino.

La Bombonera explotó: Palermo, con lágrimas, corrió a festejar y todos sus compañeros lo fueron a abrazar. Fue el último gol contra River del máximo artillero en la historia de Boca, con 234 tantos, y un total de 304 goles en primera división.

Las dos anotaciones fueron un golpe de nocaut para River, que no supo cómo reaccionar. El entrenador millonario, Juan José López, comenzó a dar indicaciones incesantemente, pero su equipo deambulaba por el campo.

En el complemento, River salió a presionar, pero no pudo reflejarlo en el marcador.

A los 80, Palermo fue relevado. Salió tan ovacionado como emocionado y se abrazó con Riquelme, a quien cedió la capitanía. Los minutos finales mostraron un River resignado e impotente, lo que se reflejó en la expulsión de Almeyda. Tras recibir la tarjeta roja, se retiró del campo besando su camiseta, discutiendo con los policías e insultando a los hinchas de Boca.

Estoy contento, disfrutando de esto. Vivo cada partido como el último, expresó el Titán Palermo.