Al empezar el torneo mucha gente no creía que Pumas fuera un aspirante serio al título, consideró Javier Cortés, autor del primero de los dos goles que metieron al equipo universitario a la final del Clausura 2011. Sin embargo, ya están dentro y pelearán por su segunda final en los recientes cinco torneos. Las cosas se nos han dado, dijo el jugador.

Con la emoción ganó confianza y se atrevió a señalar: Realmente estamos para campeones, vamos por todo, contra el rival que sea, será un partido muy fuerte, pero el próximo domingo me veo monarca, levantando la copa.

Luego del entusiasmo explicó la forma en la que se dio la anotación, la cual cambió el rostro del partido. Dijo que sólo fue aceptar la responsabilidad, atreverse y lo demás, fortuna.

Me salió, estoy muy contento. Ante Chivas se me han dado las cosas, las pocas ocasiones que tuvimos las concretamos, dijo eufóricoo.

Mientras, Palencia calma las emociones que provienen de avanzar a una final. “No –dice–, el resultado no fue contundente porque fue un partido sumamente difícil ante un rival que se complicó de más en la primera parte. Tiene excelentes jugadores pero aprovechamos bien el equilibrio que tenemos.

Admitió que había posiciones adversas de gente que no los veía como protagonistas de esta campaña, pero que eso no afectó la moral del equipo: “Nunca tuvimos dudas, siempre estuvimos bien concentrados y con la confianza de que podíamos llegar hasta aquí.

“El trabajo, combinado con el talento que hay aquí, con la planeacion de la directiva, Memo Váquez y que estamos con la disposición de hacer lo mejor para el club, dieron resultados”, agregó Paco.

El técnico Vázquez, en tanto, desestimó las críticas de quienes pensaron que los auriazules no tenían equipo luego de jugar otra temporada sin refuerzos y confiando en la cantera.

Yo no tengo que decirle nada a nadie, sabíamos que cuando venían esas críticas lo podíamos hacer. El equipo sigue igual de unido, con la misma idea, y vamos a seguir hasta el último, jugando como equipo, dijo Memo con el rostro grave como si su equipo no fuera el clasificado a la final, sino el eliminado.

El timonel aseguró que después de esta serie no se sienten favoritos y saldrán a pelear con la misma entrega como lo han hecho hasta ahora.

Estoy muy contento por haber logrado con el equipo la final. No fue fácil, el equipo de Chivas hizo un gran partido, tiene buenos jugadores, lo demostró. Tiene futuro con una gran cantera, pero ahora nos tocó a nosotros pasar, añadió.

El presidente del Guadalajara, Jorge Vergara, y su esposa, Angélica Fuentes, llegaron en medio de abucheos de los aficionados auriazules y se fueron repudiados.

Nunca cambió el rostro parco del empresario, excepto cuando su equipo recibió la segunda anotación que los eliminó de la seminifinales. Pese al mal momento asumió la derrota y no tuvo más remedio que reconocer al rival.

Llegamos a una buena instancia, perdimos como grandes, perdonamos y cuesta perdonar. A final de cuentas felicidades a Pumas y que gane el mejor en la final, señaló Vergara.

No dejó de reconocer el esfuerzo que hizo su equipo, de mostrar esperanza por un cuadro que le ve futuro y del que dice tener una solidez que le deja tranquilo. A diferencia del pasado jueves, esta vez dijo que no podía hablar del arbitraje.

No hay excusas, hoy perdonamos y nos ganaron bien. Se acabó, ahora es cuestión de aprender, de que los chavos agarren experiencia y se preparen para el año que entra, indicó.

Con esa esperanza en el futuro, aseguró que la continuidad del técnico Jose Luis Real estaba garantizada, no así la del jugador Adolfo Bautista, que dependería de la decisión del cuerpo técnico y del presidente deportivo Rafael Ortega.

El técnico rojiblanco dijo que Pumas es un digno finalista, pero también dejó en claro que su equipo fue el que dispuso de las oportunidades más claras del encuentro: Tuvimos tres, pero no pudimos aprovecharlas y ahora estamos pagando.

Dijo que podrían estar contentos porque quedaron en cuarto lugar, aunque eso no sirve de nada.

Sobre si ganó la experiencia sobre la juventud fue claro: Dejamos ir las oportunidades, no fue una cuestión de experiencia, sino de fallas gratuitas. No creo que la experiencia sea la que gane los títulos.