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Guerra en Libia
No podemos permitirnos otro Irak en Libia: Obama

El mundo estaría mejor sin Kadafi, pero sería un error sacarlo por la fuerza, dice el gobernante de EU

Rusia denuncia la injerencia de Occidente; la resolución de la ONU sólo prevé defender a civiles, afirma

 
Periódico La Jornada
Martes 29 de marzo de 2011, p. 28

Washington, 28 de marzo. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró hoy que el líder libio Muammar Kadafi está muy debilitado y que la coalición militar que lo enfrentó desde hace 10 días logró detener su avance mortal y frenó una matanza.

El también premio Nobel de la Paz advirtió que si la coalición occidental usa la fuerza militar para derrocar a Kadafi cometería un error. La coalición se dividiría. Tendríamos que poner tropas estadunidenses sobre el terreno.

Dijo que no había duda de que Libia y el mundo estarían mejor si se fuera Kadafi, y prometió buscar su salida, aunque rechazó la intención de expulsarlo del poder por la fuerza porque aumentarían los peligros a los que se enfrentan los soldados estadunidenses, así como los costos y su parte de responsabilidad por “lo que vendrá después.

Ya tomamos ese camino en Irak, dijo Obama en un amplio discurso televisado la noche de este lunes, en el cual planteó que el cambio de régimen iraquí tardó ocho años, miles de vidas y casi mil millones de dólares. Advirtió además que esto no es algo que nos podamos permitir repetir en Libia.

Obama aseguró que Estados Unidos apoyará a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) con servicios de inteligencia, logística y bloqueo de comunicaciones al régimen, lo que reducirá riesgos para Washington y costos para los contribuyentes estadunidenses.

Al defender la agresión bélica contra Libia, en un discurso desde la Universidad Nacional de Defensa, expuso: “La misión que encargué a nuestras fuerzas –la protección del pueblo libio del riesgo inmediato y el establecimiento de una zona de exclusión aérea– cuenta con el mandato de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y el apoyo internacional”.

Y añadió que este miércoles se transferirá por completo el mando de la operación Odisea Amanecer a la OTAN, aunque Washington mantendrá su apoyo a la coalición integrada por 12 naciones, entre ellas Qatar y Emiratos Árabes Unidos.

Horas antes, el gobierno de Rusia denunció que la injerencia de la coalición (occidental) en una guerra civil no está autorizada por la resolución de la Organización de Naciones Unidas, que sólo prevé el uso de la fuerza para proteger a los civiles libios de posibles ataques de las fuerzas armadas gubernamentales.

Hay una contradicción entre las declaraciones de los dirigentes occidentales cuando afirman que su objetivo no es derrocar a Kadafi y las informaciones que dan cuenta de bombardeos contra columnas de militares, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.

En la resolución de Naciones Unidas no se habla de que una coalición internacional deba tomar partido, puntualizó Lavrov, una semana después de que el primer ministro, Vladimir Putin, adoptó una postura similar respecto de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU, del 17 de marzo pasado, afirmando que su contenido le recordó las convocatorias medievales a las cruzadas.

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Un opositor libio, ayer en un camino entre Ras Lanuf y Bin JawadFoto Reuters

Casi al mismo tiempo que Lavrov lanzó sus críticas, el presidente francés Nicolas Sarkozy y el primer ministro británico David Cameron emitieron un comunicado conjunto para señalar que el régimen actual ha perdido toda legitimidad (y) Kadafi debe partir inmediatamente.

Sarkozy y Cameron –quienes activaron desde febrero la movilización diplomática y militar contra Kadafi– pidieron a sus seguidores que lo abandonen antes que sea demasiado tarde.

A la declaración conjunta franco-británica le siguió la difusión de informaciones del estado mayor del ejército francés de que aviones de combate Rafale bombardearon el domingo por la noche un centro de mando del ejército libio 10 kilómetros al sur de Trípoli.

También jets británicos Tornado dispararon hoy sobre un depósito de armas ubicado en la ciudad de Sebha, que según el Ministerio de Defensa en Londres iban a ser utilizadas en las operaciones de las fuerzas oficiales libias en Misurata. Las fuerzas británicas destruyeron el fin de semana 22 tanques en la misma región, según la misma fuente.

Las dos posiciones atacadas por franceses y británicos se encuentran en la ruta de este a oeste, que los insurrectos pretenden recorrer en su ruta a Trípoli.

El Pentágono informó en Washington, en tanto, que el fin de semana se desplegaron aviones de apoyo militar A-10 y de transporte de tropas y equipos C-130. El almirante Bill Gortney rechazó que las naves den respaldo a los rebeldes, pero reconoció que fueron utilizados para atacar a tropas de Kadafi en tierra.

La OTAN continuó hoy con el proceso de adopción del mando de las operaciones militares prescritas en la resolución 1973, en las que destaca el embargo de armas a Libia, la imposición de una zona de exclusión a las naves militares del gobierno y la protección a los civiles.

Pese a que la decisión de que la OTAN asuma el control de la zona de exclusión fue tomada el jueves, apenas hoy el comandante de las operaciones en Libia, Charles Bouchard, anunció que la medida fue puesta en práctica. El resto de las responsabilidades trasladadas por Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña se consumará el miércoles, según la vocera de la alianza atlántica, Oana Lingescu.

Qatar, en tanto, se convirtió en el primer país árabe que reconoce al insurrecto Consejo Nacional de Transición de Libia, un día después de que se difundió la versión de que en los próximos días se ocupará de administrar el comercio petrolero libio.

En otro orden, las autoridades de Libia anunciaron hoy que Eman Obaidi, la mujer que denunció haber sido violada por agentes del gobierno, fue liberada, y tras el primer interrogatorio de la fiscalía se llegó a la conclusión de que el caso no es político, sino penal, por lo que las investigaciones continuarán su marcha.