Capital
Ver día anteriorMiércoles 2 de marzo de 2011Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Protestas contra supervía, válidas si no hubiera mejoras al servicio, afirma el premio Nobel

Mario Molina, por un plan integral de transporte público

Necesario, poner restricciones al uso de vehículos particulares para evitar saturación

En marcha, programa para monitorear emisiones de camiones, tractocamiones y autobuses

Foto
Mario Molina y Marcelo Ebrard, durante la presentación del programa Sensor remoto. El acto se llevó a cabo en el módulo 12 de la Red de Transporte Público, en la delegación Gustavo A. MaderoFoto Cristina Rodríguez
 
Periódico La Jornada
Miércoles 2 de marzo de 2011, p. 38

La construcción de obras viales, como los segundos pisos o la supervía poniente, son válidas cuando se sustentan en un estudio integral, se ponen restricciones al uso de vehículos particulares y se dan alternativas en materia de transporte público, afirmó el premio Nobel de Química 1995, Mario Molina.

Entrevistado luego de inaugurar la campaña Sensor remoto para vehículos diesel, en el módulo 12 de la Red de Transporte de Pasajeros, en la delegación Gustavo A. Madero, Molina-Pasquel Henríquez sostuvo que la queja de la gente sería válida si nada más se hicieran segundos pisos, eso ya nos había pasado con anterioridad, pero no, aclaró, cuando las obras son acompañadas con acciones de transporte público.

El Nobel de Química advirtió que si no se garantiza que las obras no serán incentivo para que haya más vehículos y menos transporte público, entonces nos saldría el tiro por la culata.

Comentó que la gente que se opone a obras de ese tipo argumentando que habrá mayor contaminación no toma en cuenta que se harán mejoras en al transporte público. Si, por ejemplo, estas nuevas vialidades se licitan y hay cobros y recursos adicionales para transporte público, pues eso quiere decir que sí se está tomando en cuenta ese panorama integral.

Molina comentó que entre mejor sea la vialidad más rápido se llegará a todos lados, siempre y cuando no se saturen. De ahí la necesidad de poner restricciones al uso de los vehículos y, al mismo tiempo, ofrecer alternativas que sean realmente muy satisfactorias, para que llegue uno de manera cómoda y agradable, más rápidamente, al trabajo o al destino adonde se vaya. Hay que tener esa visión integral.

Durante el acto, el Gobierno del Distrito Federal anunció que adquirió un sensor remoto para vehículos a diesel y gasolina, que tiene un valor de siete millones de pesos, el cual servirá para monitorear las emisiones de camiones, tractocamiones y autobuses de transporte público que circulan por la ciudad.

Marcelo Ebrard Casaubon, jefe de Gobierno de la ciudad de México, explicó que el objetivo es que exista una norma para garantizar la equidad en el esfuerzo por mejorar la calidad de aire, ya que medidas como el Hoy no circula, la verificación vehicular y el cambio de tecnologías han ocasionado mejorías importantes en la calidad del aire. Sin embargo, apuntó, los vehículos a base de diesel, principalmente el transporte de carga y pasajeros, no están sujetos al mismo esfuerzo que el resto de los vehículos.

Mario Molina detalló que uno de los contaminantes más serios son las partículas pequeñas. Las que penetran a los pulmones normalmente son menores a 2 o 3 micras (PM2.5) y pueden, entre otras cosas, inducir mortalidad en gente vulnerable y causar problemas en el sistema respiratorio.