Transportistas de Querétaro, Puebla y Veracruz protestaron ayer para demandar que cese el incremento a los precios de las gasolinas y el diesel. También pidieron modificar la norma mexicana sobre pesos y dimensiones por considerar que no se aplica en forma pareja a todos los camioneros.

Aproximadamente 60 integrantes de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas AC (AMOTAC) condujeron sus vehículos a baja velocidad desde San Juan del Río hasta El Colorado, comunidad del municipio de El Marqués, en Querétaro.

Francisco Leyva Luna, delegado de la organización, señaló que hace dos años gastaban 5 mil pesos para llenar el tanque de un tráiler y ahora destinan 10 mil, lo que hace incosteable su actividad.

Explicó que si circulan por autopistas les permiten trasladar hasta 30 toneladas de carga, pero si lo hacen por carreteras estatales, el límite baja a 21 toneladas, lo que ocasiona frecuentes extorsiones de la policía.

Durante 12 horas, integrantes de la Amotac cerraron prácticamente todas las vías de comunicación con Veracruz en Teziutlán, en la Sierra Norte de Puebla. Impidieron el paso en la autopista y en la carretera federal Puebla-Teziutlán, así como en los tramos Perote-Teziutlán y Nautla-Teziutlán de la carretera federal México Tuxpan, al igual que algunos tramos que conducen a los municipios de Zaragoza, Zacapoaxtla y Hueyapan.

Afiliados a la AMOTAC en Veracruz se manifestaron en las autopistas Veracruz-Jalapa y Córdoba-Orizaba para llamar al gobierno federal a detener las alzas a los carburantes.

Con sus unidades obstruyeron ambas vialidades cada 20 minutos, lo que generó caos vehicular. En sus camiones colocaron mantas con leyendas como Calderón, escucha al pueblo y baja el diesel.

En Tepic, Nayarit, más de un centenar de personas cerraron la avenida México porque una nueva línea de transporte urbano, que llega hasta el municipio vecino de Xalisco, comenzó a cobrar el servicio a siete pesos, sin respetar la tarifa de dos pesos para estudiantes, ancianos y discapacitados, y de cinco pesos para el resto de los pasajeros.

Durante la protesta, los manifestantes obligaron al chofer de uno de los camiones a entregarles las llaves de la unidad y se las devolvieron después de que la secretaria general de Gobierno, Patricia Sánchez, escuchó sus demandas y los citó para el próximo viernes para darles una solución, según informó Jorge Armando Ortiz Rodríguez, uno de los dirigentes de la protesta.

Integrantes de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos exigieron a la Secretaría del Transporte del gobierno del estado de México sacar de circulación al menos 200 unidades toleradas de la empresa Zumpango-Anexas porque, dijeron, invaden rutas del pueblo de Santiago Tlaltepoxco desde 2006, lo que derivó la noche del lunes en un enfrentamiento con saldo de 15 unidades dañadas y varios lesionados.

La Jornada de Oriente, Mariana Chávez, Andrés T. Morales, Myriam Navarro y Silvia Chávez, corresponsales