Por octavo año consecutivo, el Distrito Federal se mantuvo como la entidad más competitiva del país, al generar 19 por ciento del producto interno bruto (PIB) nacional y 17 por ciento de los empleos, captar más de la mitad de la inversión extranjera directa e impulsar nuevos proyectos, con inversión de 20 mil millones de pesos, aunque el trato fiscal que recibe la ciudad no corresponde a esta aportación, informó la titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), Laura Velázquez Alzúa.

Al dar a conocer los resultados de la Oficina de Apertura Rápida de Negocios, explicó que aun cuando en la ciudad se obtiene 55 por ciento de la recaudación fiscal nacional, sólo recibe 12 centavos de cada peso que aporta al pacto fiscal nacional, mientras la modificación en la distribución de las participaciones federales le ha representado un costo de ocho mil 400 millones de pesos de 2008 a la fecha.

Dicho trato no puede seguir, pero tenemos políticos muy irresponsables que están poniendo en riesgo la economía de la ciudad y eso afecta al país. Así que, ante la posibilidad de que nos sigan castigando y se favorezca a otros estados, conformamos un frente común con los empresarios, algo inédito, para ir a la Cámara de Diputados y exigir que cambie esta situación, pues los riesgos son muy altos, argumentó.

Ante el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard; la consejera jurídica, Leticia Bonifaz, y el presidente de la Coparmex-DF, Juan de Dios Barba, destacó los avances económicos logrados en esta administración: hoy los capitalinos duplican el ingreso del resto de los mexicanos con 226 mil 589 pesos anuales en promedio, mientras la inversión por persona económicamente activa creció 17.3 por ciento de 2006 a 2008, a 11 mil 978 dólares.

Además, la inversión extranjera directa suma 40 mil 391 millones de dólares, 51 por ciento escala nacional, y se aprobaron 438 proyectos de inversión por 20 mil 93 millones de pesos, que generarán 60 mil 63 empleos, dada la confianza de los empresarios, destacó.

Por ello, el mandatario capitalino se comprometió a resolver problemas estructurales que atoran la inversión, porque la norma está “mal hecha o mal pensada para una zona; reducir los costos fiscales para garantizar un ritmo de inversión lo más alto posible, y ampliar la infraestructura, donde resulta necesaria una inversión público-privada. Hoy los costos que deben pagar los empresarios interesados en abrir un pequeño negocio resultan absurdos, por lo que se vuelven irregulares o no abren, reconoció.

Otra situación a atender es el uso de suelo, pues está diseñado para una sociedad con ingresos de 27 mil dólares per cápita, en una ciudad donde 45 por ciento de la población tiene menos de 4 mil dólares per cápita mensuales, por lo cual se atenderá lo relativo a la reducción de costos fiscales, análisis de normatividad para apertura de negocios, inversión en infraestructura e impulso al desarrollo de patentes.

No se trata de abandonar la protección de valores jurídicos tutelados muy relevantes, como puede ser la sustentabilidad u otros, pero sí de que se ajuste la forma de operar de la ciudad a lo que necesitan las inversiones en nuestra urbe, afirmó el titular del Ejecutivo local.