Pekín, 9 de agosto. Un alud provocado por las intensas lluvias del domingo causó la muerte de al menos 337 personas y cerca de mil 150 desaparecidos en el distrito de Zhouqu, de la norteña provincia china de Gansu, informaron las autoridades de asuntos civiles, lo que llevó a la Cruz Roja a destinar más recursos a esa zona.

Al menos un millón 800 mil metros cúbicos de lodo y rocas generados por las fuertes precipitaciones destruyeron centenares de viviendas en tres aldeas.

El gobierno de China siguió enviando hoy materiales de ayuda y equipos de rescate.

El Ministerio de Comercio anunció que puso en operación un mecanismo de respuesta de emergencia y ordenó el envío de materiales de ayuda al distrito, incluyendo 16 mil 700 tiendas, 110 mil cobijas, 222 mil abrigos de algodón, 333 mil linternas eléctricas y cuatro millones de velas.

Por su parte, el Ministerio de Ferrocarriles indicó que organizó rutas especiales de trenes para las labores de rescate y para transportar la ayuda.

Soldados de la Región Militar de Lanzhou utilizaron explosivos para abrir paso a las aguas del río Bailong.

Expertos del Ministerio de Tierra y Recursos atribuyeron el desprendimiento de tierras a la estructura geológica frágil y erosionada de la zona, que la hace propensa a deslizamientos y otros desastres naturales.