Johannesburgo, 3 de julio. Luego de quedar fuera del Mundial, el seleccionador argentino del equipo guaraní, Gerardo Martino, expresó tristeza y orgullo por haber jugado de “igual a igual’, pero lamentablemente acertó España y no Paraguay.

Sin rubor confesó: Nuestro vestuario está (triste) como debe estar, se ha hecho un gran esfuerzo. Se ha puesto todo el corazón y se ha perdido sobre el final.

El argentino dijo desconocer su futuro, ya que había concluido un ciclo de cuatro años con la albirroja. Enalteció la actuación del portero del Real Madrid, Iker Casillas: Ha tenido un mérito indudable. Ha sido decisivo. Ha parado un penal y tapado con un rebote al final.

En cambio, el delantero paraguayo Óscar Cardozo, quien se echó a llorar en el césped y salió de la cancha con el rostro cubierto por su camiseta, expresó su honda tristeza. Erré el penal, creo que si lo metía la cosa iba a ser distinta.

El atacante del Benfica del Portugal comentó que así es el futbol, pero no hay que bajar la cabeza, creo que Paraguay dejó todo dentro de la cancha.

A su vez Roque Santa Cruz consideró que el cuadro ibérico no fue superior a Paraguay, pero no tuvimos fortuna.

La prensa y aficionados paraguayos culparon al silbante guatemalteco Carlos Batres de haberlos privado de un gol legítimo, anotado por Nelson. ¡Nos robaron un gol!, indicó el diario La Nación. Paraguay dio todo y murió de pie, tituló el diario ABC en su página electrónica.