Campeche, Camp., 11 de junio. Congresistas de Estados Unidos expresaron sus profundas condolencias por el asesinato de los mexicanos Anastasio Hernández Rojas y Sergio Adrián Hernández, aunque el senador demócrata Christopher Dodd alegó que no son las únicas muertes violentas, porque desde el inicio de la guerra de Calderón contra el narco, en la frontera han muerto miles de personas, en un ciclo de violencia insoportable.

Así, los legisladores estadunidenses se anticiparon al reclamo que había preparado la delegación mexicana en el arranque de la 49 Reunión Interparlamentaria México-Estados Unidos, a la que ni senadores ni diputados se presentaron con moños negros, como había afirmado el panista Gustavo Madero, quien no participa en el encuentro.

Tanto Dodd –quien en la ceremonia inaugural pidió un minuto de silencio– como el representante Ed Pastor ofrecieron a sus contrapartes mexicanos una investigación abierta, transparente y justa de este incidente, como calificaron las agresiones de agentes policiacos, e inclusive solicitaron no prejuzgar resultados. Nuestros rezos y condolencias están con ustedes y las familias de Anastasio y Sergio, dijo Pastor.

En entrevistas por separado, diputados de PRI, PRD y PT criticaron la tibieza del gobierno de Calderón ante el asesinato de ambos mexicanos, postura que fue rechazada aquí por el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán.

El gobierno mexicano ha manifestado con cabalidad y contundencia su indignación y evalúa los recursos a que recurrirá en caso de que la investigación resulte en la culpabilidad de alguno de los agentes, dijo.

El representante diplomático refirió que no puede confirmar las versiones de que Sergio Hernández se dedicaba al tráfico de indocumentados. Entre las pruebas duras –dijo– están los videos donde se aprecian los disparos de un lado de la frontera hacia el otro lado.

En tanto, el petista Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, sostuvo que el gobierno de México tiene muchos motivos para emprender acciones multilaterales, porque han pasado muchas cosas. Debe ser más firme.

Explicó que si bien la delegación mexicana triunfará en la discusión sobre la violencia ejercida por los cuerpos policiacos de Estados Unidos contra indocumentados, tampoco se gana con un debate ríspido ni con dejarnos ir por los accidentes, por más graves que sean.

El senador Luis Alberto Villarreal (PAN) reprochó en su discurso el asesinato cobarde y cruel de Sergio Adrián Hernández, que –resaltó– nos ofende terriblemente. Dijo que los legisladores mexicanos aceptan las condolencias de sus contrapartes, pero también es necesario que en la investigación se llegue a las últimas consecuencias, con celeridad y transparencia.

Asimismo, llamó a empezar el debate para lograr una reforma migratoria que propicie flujos de personas seguros, legales, ordenados y respetuosos de los derechos humanos.

Al respecto, Christopher Dodd dijo estar desilusionado de que el Congreso de su país no haya aprobado un proyecto que reconozca la realidad de miles que viven en la sombra y, fundamentalmente, que Estados Unidos no puede deportar a 12 millones de personas.

En la agenda del primer día de trabajos –este sábado– se incluirá el debate sobre la cooperación en la lucha contra el crimen organizado, la violencia transfonteriza, el tráfico de armas y drogas, lavado de dinero y, por la tarde, los temas económicos y de energía, así como migración.