Funcionarios del gobierno capitalino informaron que por ley todas las entidades tienen la obligación de cambiar cada tres años la placa y tarjeta de circulación de sus autos particulares en cumplimiento de la norma federal NOM-001-SCT-2-2000, con el fin de actualizar el padrón vehicular. Sin embargo, se logró que sólo fuera la tarjeta, con un costo de 220 pesos, lo que aprobó la Asamblea Legislativa en diciembre pasado.

En el festejo con motivo del Día de las Madres, organizado por el sindicato del Gobierno del Distrito Federal, el secretario de Finanzas, Mario Delgado, aclaró que la medida no tiene fines recaudatorios y deriva de un acuerdo con las autoridades federales en materia de seguridad pública y normatividad, mismo que está desfasado un año y cuyo incumplimiento implicaría una sanción.

Las negociaciones con funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes permitieron que los propietarios de automóviles particulares paguen una cuarta parte del costo de un remplacamiento, 800 pesos, como se realiza en otros estados, pues sería inoportuno hacerlo en estos tiempos. Así que se buscó la opción más económica para la ciudadanía que cubra los costos de logística para renovar el padrón vehicular, como se señala en la Ley de Ingresos y Código Financiero 2010, precisó.

El secretario de Transportes y Vialidad, Armando Quintero, explicó que esta medida no es nueva ni de índole local, sino que es una ley que debemos acatar, por lo que a partir del 14 de marzo de 2008 empezaron a entregarse las primeras tarjetas de circulación con 21 medidas de seguridad de manera exclusiva a los propietarios de vehículos nuevos y altas. Así que de un padrón de 3 millones 809 mil 491 unidades, se tiene un avance de 920 mil, casi 25 por ciento del total.

Los automovilistas que faltan podrán solicitar por Internet su cita a partir del 20 de mayo y hasta el 30 de junio del próximo año, pues su presentación será obligatoria en la segunda verificación de 2011, lo que implica estar al corriente en el pago de tenencia y contar con un padrón confiable, a prueba de Santo Domingo, pues después de tres años cae a 40 por ciento su confiabilidad, por la compra o baja de vehículos, con la consecuente incertidumbre e inseguridad.

Los recursos que se obtengan cubrirán los 10 millones de pesos del software elaborado por la UNAM; el desarrollo de una red de cómputo instalada en los 16 módulos delegacionales y la oficina central de Insurgentes Sur, pues las que habían eran viejísimas; y capacitación del personal. Así que no irá un sólo centavo para la probable campaña del jefe de Gobierno en 2012, como señalan algunos que mal ven a este gobierno, aclaró.

La directora de Regulación al Transporte, Francis Pirín, señaló que el costo es bajo si se considera que incluye el registro de cambio de propietario, domicilio y motor; corrección de datos; y reposición por pérdida de la tarjeta de circulación. En este momento se pagaría mil pesos más el valor del chip. La primera fase de esta estrategia consiste en depurar y actualizar el padrón vehicular.

Otra etapa consiste en la colocación del chip GPS, que empezará en enero de 2011 para la identificación de las unidades, detección de vehículos robados y dar certeza en la compra y venta entre particulares. Se trata de una medida de alta seguridad al grabar su número en la tarjeta y viceversa, para evitar el emplacamiento de un carro robado aquí en otro estado.