Una gran exposición del artista belga René Magritte (Lessine, 1898-Bruselas, 1967) se montará en el Museo del Palacio de Bellas Artes. La muestra, que reúne pinturas, dibujos, grabados, partituras, fotografías y filmes se inaugurará el miércoles 17 y concluirá en julio.

Las obras de El mundo invisible de René Magritte engloban las tendencias del artista y prestan especial atención a su etapa de surrealismo pleno, en la que los objetos, existentes o inventados, acaban siendo el motivo central de la pieza.

Cotidianidad del artista

La exposición incluye una selección de fotografías en las cuales se presenta a Magritte en un ámbito cotidiano, donde desarrolla su quehacer creativo con los integrantes del grupo surrealista belga, acompañado de sus amigos, su esposa y sus perros; también se muestran retratos de fotógrafos que entablaron relación con el artista. Destacan las imágenes tomadas durante la filmación de la película Magritte o la lección de las cosas, de Luc de Heusch (1959).

El mundo invisible de René Magritte reúne 152 piezas procedentes de 34 préstamos, de museos y colecciones particulares de nueve países, entre los que figuran los museos de Arte Moderno, de Nueva York; Reales de Bellas Artes, de Bélgica; el Magritte, de Bruselas; el Smithsoniano de Arte Americano, de Washington; el de Arte de Israel, de Jerusalén; el Nacional de Arte Moderno, de París; el de Bellas Artes, de Charleroi, Bélgica; la Colección Menil, de Houston, Texas; la Galería Tate, de Londres; el Instituto de Arte de Chicago, la Galería Nacional de Arte, de Washington, y el Centro Georges Pompidou, entre otros.

La curaduría está encabezada por Roxana Velásquez y Sandra Benito, del Museo del Palacio de Bellas Artes, con la asesoría de un comité curatorial integrado por la Fundación Magritte y los Museos Reales de Bellas Artes, de Bélgica.

La muestra está acompañada de un catálogo en color con las piezas que se exhibirán, junto con textos escritos por especialistas en el tema, como Michel Draguet, Pierre Sterckx, Nicole Everaert-Desmedt, Claude Goormans y Teresa del Conde, colaboradora de La Jornada.

Entre las obras de la exposición El mundo invisible de René Magritte figuran La fin des contemplations, 1927; Le palais de’une courtisane, 1928; La bonne nouvelle, 1928; Le grand style, 1951; La folie des grandeurs, 1962; La force des choses, 1958; L’ abandon, 1929; Le monde invisible, 1954; Les origines du langage, 1955; Le manteau de Pascal, 1954, L’ aimable vérité, 1966.

René Magritte es uno de los más notables representantes del surrealismo, vertiente de gran impacto en el arte universal y en México durante la primera mitad del siglo XX. Su originalidad al crear relaciones inesperadas entre los objetos y la pintura, constituyó el eje de su producción. A partir de la agudeza irónica y el pensamiento paradójico, desplaza elementos tomados del imaginario cotidiano a escenarios derivados del mundo de los sueños, la fantasía y el subconsciente.

En esta ocasión, se integró a la exhibición un espacio lúdico que permitirá a niños y jóvenes aproximarse a la creatividad del artista belga de una manera novedosa y didáctica.

En esta sala los visitantes pueden involucrarse con los postulados del creador por medio del juego y la vivencia estética.

Impacto en la posrevolución

Como parte de la exposición se desarrollará en abril un coloquio dedicado a Magritte en la sala Manuel M. Ponce, en el cual participarán Michel Draguet, director de Museos Reales de Bellas Artes de Bélgica; Didier Ottinger, del Centro Georges Pompidou; Nicole Everaert-Desmedt, investigadora de la Universidad de Saint-Louis, y Claude Goormans, de la Fundación René Magritte.

En el encuentro los expertos debatirán sobre los planteamientos estéticos de Magritte y los aspectos más relevantes de su aportación artística, así como los puntos de encuentro entre el surrealismo europeo y el mexicano, durante el siglo XX.

La originalidad de René Magritte dentro del panorama de la historia del arte universal, aunada a la trascendencia del surrealismo en la vida artística de México, hace de esa gran exposición del artista belga un acontecimiento sin precedentes.

El contenido permitirá enriquecer el conocimiento de una manifestación plástica que tuvo gran impacto en las posturas de los artistas en la época posrevolucionaria, a partir de la visita de personajes como Edward James y André Breton, fascinados ante un territorio idóneo para el desarrollo de la fantasía y la intuición, a la par de lo cotidiano y lo onírico.

El mundo invisible de René Magritte será inaugurada el miércoles 17 de marzo, a las 19 horas, en el Museo del Palacio de Bellas Artes (avenida Juárez y Eje Central Lázaro Cárdenas).