Una bala perdida causó la muerte del vocalista de un grupo musical que amenizaba la fiesta anual del pueblo de Santo Tomás Ajusco, en Tlalpan, luego de que en una riña entre integrantes del público, uno de los asistentes disparó en varias ocasiones al aire.

Los hechos ocurrieron durante los primeros minutos de ayer, y según el reporte policiaco, Salvador Sedeño Márquez, de 21 años, integrante del grupo Brillo y Sol –procedente de Atlacomulco, Jalisco, para amenizar la fiesta–, cantaba cuando se inició la gresca entre varias personas que se encontraban en estado de ebriedad.

Uno de los rijosos sacó una arma de fuego, la cual accionó aparentemente sin apuntar a nadie; sin embargo, uno de los disparos le dio en el abdomen al cantante, quien trataba de calmar los ánimos desde el escenario.

Lo anterior tuvo lugar frente a la iglesia del pueblo, ubicada en la esquina de José María Morelos y Mariano Matamoros, y aunque al lugar llegó una ambulancia, los paramédicos reportaron que al dar los primeros auxilios Sedeño Márquez ya había muerto.

En tanto, los participantes en la riña y el presunto homicida se perdieron entre la multitud que se encontraba en lugar, y al ser cuestionados sobre el sujeto que realizó los disparos, los asistentes a la celebración dijeron no conocer a dicha persona, por lo que no hubo detenidos, pese a que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal iniciaron la búsqueda respectiva.

La coordinación territorial Tlalpan Dos tomó conocimiento de los hechos e inició la averiguación previa correspondiente, en tanto que el cuerpo fue llevado al anfiteatro de la agencia 23 del Ministerio Público para realizar la necropsia de ley.