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La PGR investiga la identidad de nueve detenidos el viernes

Graves, 4 heridos en el choque narcos-marinos en Nuevo León
Corresponsal y reportero
Periódico La Jornada
Domingo 6 de diciembre de 2009, p. 7

Monterrey, NL, 5 de diciembre. Cuatro personas que resultaron heridas durante el enfrentamiento del viernes entre militares y un comando del grupo delictivo Los Zetas, en el municipio metropolitano de Benito Juárez, fueron reportadas en estado grave.

En el hospital de zona están internados Jéssica Anahí González Hernández y Alexis Izquierdo Tolentino, de 16 y 12 años de edad, quienes recibieron disparos en la cabeza.

En cuidados intensivos del Hospital Universitario se encuentran Daniel Rodríguez Berumen y un hombre que también tiene un tiro en la cabeza. No se ha podido determinar si éste es gatillero o uno de los civiles víctimas del fuego cruzado.

También ahí están internados, en calidad de detenidos, siete supuestos sicarios, quienes cuando sean dados de alta serán trasladados a la ciudad de México y quedarán a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), al igual que los nueve que fueron llevados el viernes a la capital del país.

Este sábado se informó que continúan prófugos los 15 integrantes de Los Zetas que, junto con otros ocho indiciados, fueron liberados por pistoleros de la casa de arraigo dos del municipio de Escobedo.

Entre los evadidos se encuentra Juan Carlos Martínez Hernández, El Camaleón, segundo en el mando de la organización delictiva, que opera como brazo armado del cártel del Golfo en el municipio de Guadalupe.

Según fuentes de la PGR, El Camaleón era investigado por la desaparición de al menos 10 personas, a quienes secuestró para exigir rescate, y traficantes de drogas al menudeo castigados.

Martínez Hernández y otros ocho sicarios, además de dos mujeres y dos policías municipales que les daban protección, fueron capturados por el Ejército el 25 de octubre en una finca de la colonia Rincón de la Sierra, de Ciudad Guadalupe, cuando los gatilleros departían acompañados por mujeres con sus niños, quienes supuestamente se encargaban de cuidar y alimentar a los plagiados.

Al comentar las acciones del Ejército y la Marina que derivaron en la muerte de 10 hampones, dos presuntos secuestrados (en realidad eran traficantes de drogas al menudeo castigados) y una mujer víctima del fuego cruzado, el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, aseveró que por difícil que sea la lucha contra el narcotráfico jamás nos doblegaremos, por difícil que sea nuestra situación y amenazas contra la seguridad e integridad, pues siempre prevalecerá la fuerza del Estado.

Durante una ceremonia en la que se entregaron cartillas del Servicio Militar Nacional a jóvenes, el político priísta destacó que los militares no son héroes anónimos, sino héroes con nombre y apellido.

Sobre la muerte de una mujer que pasaba por la zona durante el choque, Guillermo Moreno Serrano, comandante de la Cuarta Región Militar, destacó: qué tristeza. No tengo palabras, más que un profundo dolor, máxime cuando son víctimas del momento, de las circunstancias. No obstante, advirtió que los operativos contra el crimen organizado serán permanentes.

Los trabajos de la PGR

Mientras tanto, la Procuraduría General de la República (PGR) investiga la identidad de los nueve detenidos por elementos de la Secretaría de Marina (Semar) tras el enfrentamiento, que dejó saldo de 13 muertos.

De acuerdo con fuentes de la Semar, una pistola con grabados en oro permitió identificar plenamente a Ricardo Almanza González, El Gori 1, quien murió durante el choque en la finca campestre de la colonia Bosques de la Silla. El trabajo fue posible debido a que la dependencia realiza una investigación para detener a los autores materiales del asesinato del general Alejandro Esparza García, secretario de Seguridad Pública del municipio de Guadalupe, quien fue ejecutado junto con sus cuatro escoltas el pasado 4 de noviembre.

Tras el combate, los marinos lograron identificar entre los sicarios muertos a otro de los líderes del cártel de Los Zetas en Monterrey. Aunque no se dio a conocer su nombre, funcionarios de la Semar señalaron que éste era conocido como El Flaco.

En tanto, la SIEDO mantiene detenidos y rindiendo declaración a Ángel Marroquín Silva, de 34 años; Ladislao González Silverio, 28; Iván Sánchez Mejía, 28; Delfino Reyes Morato, 30; Gilberto Reyes Ambriz, 34; Francisco Cruz González, 22; José Reyes Orozco, 30; Alejandro Morales Segovia, 28, y Raúl Campos Sandoval, 26.