efinitivo, tampoco este sexenio se construirá el Museo de la Mujer. No hay intención de concretar el proyecto que en 2003 propuso la licenciada Patricia Galeana a la señora Marta Sahagún. La licenciada dirige una Federación Mexicana de Mujeres Universitarias, FEMU, y logró una reunión en Los Pinos donde expuso a la esposa del señor Fox su proyecto de convertir la casa donde vivió la heroína de la Independencia Leona Vicario, en Museo de la Mujer. En éste, entre otras cosas, se haría un recorrido desde la época prehispánica hasta nuestros días con el fin de que se revalore la participación femenina en la historia nacional.

A la reunión asistió un grupo de mujeres vinculadas con la academia y la burocracia, encabezadas por la ex gobernadora de Colima Griselda Álvarez, quien elogió la labor de la señora Marta en favor de la equidad de género. La señora prometió toda su ayuda para el museo, con la condición de que debe ser público, un sitio donde surja el debate, se realicen conferencias, se impulse la proyección de valores, en los diferentes sentidos y distintas disciplinas de mujeres, artísticas, culturales, de poesía y música.

Para avalar el proyecto hubo otra reunión en Los Pinos, a la que asistieron las pintoras Marta Chapa, Carla Rippey, Fanny Rabel y las actrices Angélica Aragón y Martha Aura, entre otras figuras de las artes plásticas y el teatro. Algunas de las asistentes después declararon que no supieron a qué fueron y que desconocían el proyecto.

Esta vez la señora Marta les dijo que no había encontrado eco en los empresarios para apoyar el museo y que había que formular un proyecto con más expectativas. No sólo debía ser un museo, sino un centro cultural que abra espacios para el teatro y la danza. En paralelo, pintores como José Luis Cuevas, Sebastián, Guillermo Ceniceros y Federico Silva donaron obra para el proyecto. En esa ocasión el escultor Sebastián reflexionó sobre su madre: no soy edípico, lo que sucede es que gracias a su inteligencia y fuerza pudo criar tres niños con una moral profunda.

Pero el entonces titular del Instituto Nacional de Bellas Artes, Saúl Juárez, dijo que por ningún motivo cederían la casa de Leona Vicario. En contraste, la presidenta de Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Sari Bermúdez, se interesó mucho en el proyecto y como prueba de ello lo guardó en lo más profundo de su escritorio.

Descartado el apoyo de los Sahagún-Fox, el proyecto fue entregado en 2006 a los candidatos presidenciales. Uno de ellos, López Obrador, dijo que lo iba a estudiar, que le parecía una buena propuesta. Lo último que se sabe del nuevo museo es la declaración de la licenciada Galeana de que no puede haber centenarios sin reconocer el trabajo que las mujeres hicieron en la construcción de México.