La Paz, 18 de mayo. En un histórico juicio contra el ex presidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003), que se inició hoy, la Corte Suprema de Justicia declaró hoy en rebeldía a seis de sus ex ministros, acusados de genocidio en su modalidad de masacre sangrienta por la represión de protestas populares en octubre de 2003, con saldo de 68 muertos y más de 400 heridos.

El juicio oral que comenzó en Sucre, capital de Bolivia y sede del Poder Judicial, involucra a los ex ministros de Desarrollo, Jorge Torres Obleas; Mirtha Quevedo, de Participación Popular; Javier Torres Goitia, de Salud; Guido Añez, de Agricultura; Hugo Carvajal, de Educación, y Yerko Kukoc, de Gobierno.

Cientos de personas viajaron desde la ciudad de El Alto –de donde era la mayoría de las víctimas del denominado Octubre negro– tanto para declarar como para dar seguimiento al proceso, en el que participarán dos mil 500 testigos y se presentarán cuatro mil 900 pruebas, según fuentes judiciales.

Luego de que se instauró el juicio y se declaró en rebeldía a los acusados ausentes, se ordenó un receso hasta que se resuelva una recusación contra el tribunal, presentada por uno de los ministros ahora prófugos, Yerko Kukoc.

Sánchez de Lozada y dos de sus ex ministros, el de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, y el de Hidrocarburos, Jorge Berindoague, están refugiados en Estados Unidos y fueron declarados en rebeldía el año pasado por la Corte Suprema de Justicia, que además pidió su extradición.

Quevedo, Torres Goitia y Torres Obleas se asilaron en días pasados en Perú, pero de acuerdo con el fiscal Milton Mendoza, se pedirá a Lima su extradición.

Desde Miami, Berzaín se quejó en entrevistas difundidas por televisoras bolivianas de que en este proceso los jueces no son imparciales.

La abogada de Sánchez de Lozada dijo desde Washington que las acusaciones contra su cliente no tienen mérito.