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Los gobiernos federal y de Veracruz auspician una intervención arquitectónica moderna

Planean poner en valor para hacer más atractivo el Castillo de San Juan de Ulúa

El proyecto integral prevé acondicionarlo para realizar actos masivos, manifiesta el INAH

La idea es que la fortaleza no sólo sea un sitio de contemplación, dice funcionario del instituto

Foto
Vista parcial del fuerte de San Juan de Ulúa, en el puerto de VeracruzFoto Luz María Rivera
Especial para La Jornada
Periódico La Jornada
Miércoles 22 de abril de 2009, p. 5

Veracruz, Ver., 21 de abril. Con una inversión de más de 30 millones de pesos, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se afana en la intervención arquitectónica moderna del Castillo de San Juan de Ulúa, uno de los edificios emblemáticos del puerto de Veracruz.

Para mayo, el instituto habrá de licitar, de manera pública, las diversas obras que se planean en el proyecto integral, en el cual interviene la Federación, el gobierno del estado y el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, por conducto del Fideicomiso San Juan de Ulúa, todo ello con el objetivo de que la antigua fortaleza se convierta en un atractivo todavía mayor y pueda llegar a albergar hasta 10 mil personas.

En este año y para el próximo en San Juan de Ulúa se trabajará para habilitar un restaurante, una cafetería, tienda y librería en el conjunto de lo que el INAH identifica como segunda etapa de intervención 2009-2010.

Ese es el plan, a grandes rasgos, para el antiguo bastión militar español que fue, en sucesivas épocas, cárcel para opositores políticos y residencia oficial de presidentes y gobernadores.

Vigilancia electrónica

Saúl Alcántara Onofre, director de Apoyo Técnico de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH, quien está a cargo de la supervisión de la obra en San Juan de Ulúa, explica que hablar de arquitectura moderna de ningún modo es engañar o alterar la traza original de la construcción.

Se requiere, afirma, la fabricación y montaje de un nuevo puente de acceso, que de ningún modo se hará pasar como original y que vendrá a integrarse, de manera natural al entorno; también se planea la demolición de agregados de concreto armado y sanitarios en la Casa del Gobernador, así como la instalación de sanitarios nuevos en otras áreas con aditamentos para tratar aguas residuales.

El funcionario del INAH admite que el objetivo de esta intervención es recuperar el espacio para usos múltiples y masivos, y entregárselos a los veracruzanos, al país... y que no sea sólo un sitio de contemplación.

Saúl Alcántara reconoce que si bien la ley vigente para zonas y sitios arqueológicos e históricos restringe el uso comercial o masivo, San Juan de Ulúa es un espacio que está vivo y pretendemos que siga vivo. De ningún modo, dice, es un reducto arqueológico, y afirma que no se va a tocar el edificio, no se van a hacer intervenciones radicales ni se llegará a ese tipo de polémica; de lo que se trata es de ponerlo en condiciones de uso y darle los servicios que debe tener.

Alcántara dice que es la puesta en valor de San Juan de Ulúa, una frase que resume la visión del proyecto de la Federación, que implica también la operación de un museo de sitio en el castillo, alumbrado exterior e interior, así como equipo de vigilancia electrónica.

Foro público en Veracruz

Por su parte, Salvador Aceves García, quien es asesor del director del INAH, Alfonso de Maria y Campos, reconoce que si bien hay un sector que no concuerda con la utilización de espacios de este tipo para usos masivos, también afirma que en el caso de San Juan de Ulúa éste se dio a conocer internacionalmente a raíz del concierto del tenor Andrea Bocelli.

Los arquitectos del INAH asistieron este martes al foro público sobre la rehabilitación del Centro Histórico, en el contexto de las celebraciones de algunas efemérides, como el de la intervención armada estadunidense en 1914.

Allí se debatió sobre el enfoque de las intervenciones arquitectónicas a la ciudad, y se criticó la nula vigilancia del ayuntamiento a la ejecución de obras como en el Baluarte de Santiago.