Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER  
Domingo 28 de enero de 2007 Num: 621


Portada
Presentación
Bazar de asombros
HUGO GUTIÉRREZ VEGA
Hacer mella, cicatrizar, construir
JOSÉ-MIGUEL ULLÁN
Sentir un dictado
OCTAVIO AVENDAÑO TRUJILLO
entrevista con ENRIQUETA OCHOA
Dos poemas
ENRIQUETA OCHOA
Economía y cultura. Botella al mar
ANDRÉS ORDÓÑEZ
Esperemos lo mejor, Ryszard
RICARDO BADA

Columnas:
Señales en el camino
MARCO ANTONIO CAMPOS

Las Rayas de la Cebra
VERÓNICA MURGUíA

Bemolsostenido
ALONSO ARREOLA

Cinexcusas
LUIS TOVAR

Corporal
MANUEL STEPHENS

Cabezalcubo
JORGE MOCH

El Mono de Alambre
NOÉ MORALES MUÑOZ

Mentiras Transparentes
FELIPE GARRIDO

Leer
Reseña de Gabriela Valenzuela Navarrete sobre Más allá de latitudes y poesía


Directorio
Núm. anteriores
[email protected]

 


FELIPE GARRIDO

EL SAPO Y LA LLUVIA

En otro tiempo no había maíz y el hombre sufría hambre. Entonces envió al cuervo para que se lo robara al diablo. El diablo lo vio llegar y le preguntó: "¿Qué vienes a robarme?" El cuervo no dijo nada; en cuanto el diablo se descuidó se robó el maíz y fue con el hombre para decirle cómo debía sembrarlo; pero como no llovía nunca, las matas se secaron. El cuervo fue con el dios de la lluvia y le pidió que se la mandara al hombre. El dios dijo que así lo haría, pero lo que hizo fue golpear al cuervo con el viento. Lo mismo sucedió con la paloma y el perro. Entonces el sapo salió por la lluvia, y fue dejando a sus hijos en el camino. El dios, como siempre, dijo que sí la mandaría, pero lo que hizo fue correr tras el sapo para golpearlo con el viento. Cuando lo alcanzó, vio que adelante había otro sapo, y otro, y otro. Y así, de sapo en sapo, llegó hasta el hombre. Desde entonces, dicen los viejos, las lluvias y los sapos llegan juntos.