El tricolor se jacta de haber recuperado importantes ciudades como Puebla, Tampico y Zamora

Retiene el PRI 2 gubernaturas y pelea otras dos con AN; para el PRD, cero

En Michoacán, donde se eligieron alcaldías, abstencionismo de 60% y los incidentes más graves

En los procesos electorales de este domingo -donde los estados de Sinaloa y Tlaxcala tuvieron comicios más disputados de lo que habían adelantado las encuestas- el Partido Revolucionario Institucional (PRI) retuvo las gubernaturas de Tamaulipas y Puebla, y peleaba con el Partido Acción Nacional (PAN) las de Sinaloa y Tlaxcala. Ahí los abanderados de ambos institutos políticos se declararon ganadores, pero los órganos electorales contaban los votos con lentitud y los resultados estaban tan cerrados que las tendencias no podían darse todavía como definitivas.

En Michoacán, donde se eligieron presidentes municipales y diputados locales, el abstencionismo alcanzó 60 por ciento de un padrón de más de 2 millones 700 mil ciudadanos. Fue aquí donde se presentaron los incidentes más fuertes: -no se instalaron 12 casillas y la papelería electoral de dos más fue quemada en la meseta purépecha. El panista Salvador López Orduña se perfilaba como el triunfador en la alcaldía de Morelia, que actualmente detenta el PRI.

La elección que se resolvió más temprano fue la de Tamaulipas. Cerraban las últimas casillas cuando los partidos y las empresas de comunicación anunciaron que el PRI ganaría los comicios con casi 40 puntos de diferencia y una abstención de 50 por ciento del padrón. Con 49.2 por ciento por ciento de las casillas computadas a la medianoche, el candidato tricolor, Eugenio Hernández Flores, se perfilaba como el próximo gobernador, con 58.26 por ciento de la votación (302 mil 203 sufragios).

El abanderado panista, Gustavo Cárdenas Gutiérrez, se ubicó en segundo lugar, con 31.23 por ciento de los sufragios (162 mil 146 votos); en tercer lugar quedó Alvaro Garza Cantú, candidato de la Alianza Unidos por Tamaulipas (Partido de la Revolución Democrática y Convergencia), con 7.22 por ciento de las preferencias electorales (37 mil 448) y, en cuarto sitio, el candidato del Partido del Trabajo (PT), Bruno Alvarez, al registrar a su favor sólo 1.32 por ciento de los sufragios (6 mil 861 votos).

En la elección de diputados, el PRI iba adelante en los 19 distritos electorales. En el fronterizo ayuntamiento de Reynosa (con el mayor número de electores en la entidad) el PAN parecía arrebatar al priísmo la presidencia municipal; una situación inversa se daba en Tampico. El PRD perdió Ciudad Madero, su único bastión en Tamaulipas, frente al PRI-Verde, por diferencia de seis mil votos. La capital, Ciudad Victoria, seguiría en poder de los priístas.

En Puebla, con 27 por ciento de las casillas computadas, el priísta Mario Marín Torres aventajaba con 244 mil 843 votos (53 por ciento de los votos), al panista Francisco Fraile, quien obtuvo 176 mil 797 (38.32 por ciento de los sufragios) y muy lejos, el perredista Alejandro Villar Borja, sumaba 13 mil 500 votos, apenas 2.94 por ciento de la votación. Según los sondeos de opinión, la capital de Puebla será recuperada por el PRI, pero el conteo oficial era tan lento que apenas habían sumado unas cuantas casillas al cierre de la edición.

La lentitud del Sistema de Resultados Electorales Preliminares (PREP) instalado en Tlaxcala generó anoche un ambiente de incertidumbre, que dio pie a que los candidatos a la gubernatura de la Alianza Ciudadana de Tlaxcala, encabezada por el PAN, y el de Todos somos Tlaxcala, con el PRI como primera fuerza, se proclamaran ganadores en una elección que las empresas encuestadoras definieron como muy "cerrada".

Lo que quedó claro desde media tarde es que el PRD no retendrá la gubernatura y que los ánimos sucesorios de la esposa del gobernador Alfonso Sánchez Anaya -quien convalece de un problema cardiaco-, naufragaron.

Pasada la media noche, cuando se habían contabilizado 363 de las mil 105 casillas (32 por ciento de las instaladas), Mariano González Zarur sumaba 36.31 por ciento de los sufragios, por 35.57 por ciento de Héctor Ortiz Ortiz; es decir, una diferencia de 0.64 por ciento. La candidata de la Alianza Democrática, Maricarmen Ramírez García, acumulaba 25.57 por ciento de los votos. El cómputo de las diputaciones y las presidencias municipales era todavía más lento.

En Sinaloa, computadas 70 por ciento de las casillas, el abanderado tricolor, Jesús Aguilar Padilla, sumaba 300 mil 680 votos (47.092 por ciento), frente a los 288 mil 507 del panista Heriberto Félix Guerra (45.185). El sol azteca contabilizó 28 mil 27 sufragios (4.3 por ciento de la votación emitida).

Por la noche, 30 simpatizantes del candidato priísta a la alcaldía de Tampico, Fernando Azcárraga López, resultaron lesionados al derribarse las tarimas donde festejaban su virtual triunfo en la contienda municipal. Los hechos ocurrieron en la avenida Hidalgo esquina con Violeta luego de que el consejo municipal electoral emitió el último corte del PREP. Ninguna de las personas fue hospitalizada y ahí mismo fueron atendidas.

En un comunicado, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI dijo haber ganado todas las gubernaturas en disputa. El dirigente nacional priísta, Roberto Madrazo Pintado, se jactó de haber "podido construir un partido de vanguardia que hoy cuenta con más de 38 por ciento de la preferencia electoral". Además, sostuvo que recuperaron importantes ciudades, como la capital poblana, así como Tampico, Ciudad Madero, Río Bravo y San Fernando, en Tamaulipas. En el estado de Michoacán se reconquistaron Zamora, Paracho, Lázaro Cárdenas, Tacámbaro, Pátzcuaro, Zitácuaro y Sahuayo.

El líder nacional perredista, Leonel Godoy Rangel -quien permaneció en Michoacán durante la jornada electoral-, reconoció la derrota del sol azteca en Puebla, Tamaulipas y Sinaloa, no así en Tlaxcala, donde, aseguró, Ramírez García mantenía empate técnico con el candidato tricolor, González Zarur.