Aclaran que sólo apoyarán a la UNT y al sindicato del IMSS en las marchas

Confían obreros en evitar huelga en Volkswagen

FABIOLA MARTINEZ

El Sindicato de Trabajadores de Volkswagen de México y la representación de esa compañía de capital alemán se encuentran en el último tramo de la revisión contractual, cuyo emplazamiento a huelga vence el 18 de agosto. Este proceso ocurre en la peor crisis de la planta ubicada en Puebla, la cual cerrará este año con una producción de 224 mil unidades, equivalente a 50 por ciento de su capacidad instalada.

Ahora esperamos más "descansos largos", un nuevo paro técnico para noviembre y un repunte en la producción para el próximo año, declaró José Luis Rodríguez Salazar, dirigente del sindicato.

Entrevistado en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, donde se lleva a cabo la negociación del contrato colectivo de 9 mil 750 sindicalizados, el dirigente precisó que mantienen una demanda "negociable" de 8.5 por ciento de aumento directo al salario y 4.1 en prestaciones. Aun cuando el llamado "tope salarial" o el promedio que han otorgado la mayoría de las empresas este año ronda el 4.5 por ciento, los empleados de Volkswagen confían en rebasar -por lo menos en algunas décimas- ese nivel.

En esta ocasión, señaló, la perspectiva de un acuerdo que evite la huelga es "muy favorable, hay buen ambiente", en particular porque la empresa atraviesa por un periodo sumamente difícil. En lo que va del año, los obreros han tenido "descansos largos" -como llaman a los días que obligatoriamente se quedan en sus casas, sin trabajar- en la primera semana de abril y la segunda de mayo pasado. Ahora esperan un nuevo receso para noviembre, toda vez que la recuperación podría ocurrir a partir del próximo año, cuando ingrese a la línea de producción un nuevo modelo.

"La situación es crítica, éste ha sido el peor año para la empresa desde que se instaló en el país; hablamos de un cierre de 224 mil unidades, cuando el récord se ubica en poco más de 480 mil", agregó.

Los obreros de Volkswagen regresarán en breve al esquema de 4x3, es decir, cuatro días laborados por tres de descanso, alternativa que el sindicato aceptó hace un año para evitar 2 mil despidos.

En otro tema el sindicato, cofundador de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), anunció que no participará en el paro convocado por esta central el próximo primero de septiembre contra la reforma a la Ley del Seguro Social. No obstante, se comprometió a enviar un grupo para marchar en la movilización del 31 de agosto, lo mismo en la protesta de la ciudad de México que en la de Puebla.

Rodríguez Salazar justificó la distancia que tomará este gremio: "Nos asusta que se repita esa situación. Debemos ser solidarios pero ahora será difícil participar en algún paro. No es algo inventado, la crisis por la que atravesamos es grave".