Se dañarían irreversiblemente los terrenos de siembra y el agua potable sería insuficiente

Protestas en Tecámac contra la construcción de 120 mil viviendas

Perredistas exigirán en el Congreso estatal investigar las irregularidades que se cometieron en el plan

JAVIER SALINAS CESAREO CORRESPONSAL

Tecamac, Mex., 9 de junio. Alrededor de 400 habitantes de al menos 15 colonias y ejidos realizaron un mitin frente al palacio municipal local para exigir al gobierno estatal y al alcalde Aarón Urbina Bedolla revocar la autorización otorgada para la construcción, en los próximos diez años, de 120 mil viviendas de interés social en este municipio.

Los manifestantes dijeron que las obras ocasionarán que lleguen a Tecámac alrededor de 600 mil nuevos habitantes. Las 120 mil viviendas se sumarían a las casi 35 mil que el gobierno municipal ha autorizado desde 1997. Asimismo, acabarán con los terrenos de siembra, ya que las obras se realizarían sobre 2 mil hectáreas ejidales y desde ahora los empresarios inmobiliarios presionan para que los ejidatarios vendan sus tierras.

Asimismo, las nuevas viviendas agudizarán los severos problemas viales, especialmente sobre la carretera libre federal México-Pachuca, que ya registra saturación. También el abasto de agua potable se agravará, porque la infraestructura no se ampliará.

Los vecinos recordaron que el 10 de diciembre de 2003 se publicó en la gaceta del gobierno estatal el plan de desarrollo del municipio de Tecámac, en el que el secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda del gobierno mexiquense, Francisco Covarrubias Gaitán, dio el visto bueno al programa que autoriza la construcción de 120 mil viviendas.

El plan municipal estipula que antes de tomar la decisión el ayuntamiento realizó una consulta pública entre la población con base en ella determinó otorgar las concesiones. Pero los vecinos indican que nunca existió dicha deliberación; además, dijeron, la Secretaría de Desarrollo Urbano estatal no realizó una revisión a conciencia de la legalidad del proyecto. "No han presentado los estudios de impacto ambiental que demuestren su viabilidad, sobre todo absorbiendo parte de terrenos ejidales del municipio", dijeron.

Aunque en el plan de desarrollo municipal no se indica sobre qué terrenos habrán de edificarse las viviendas, los ejidatarios de San Jerónimo Xonacatlán, San Pedro Pozohuacán, Santa María Ajoloapan y San Pablo Tecalco, entre otros, destacaron que ellos se verán afectados por los proyectos inmobiliarios.

Aunque tampoco explicaron a qué empresas fueron otorgadas las concesiones, denunciaron que personas presuntamente vinculadas con las inmobiliarias Urbi, GEO y Sadasi los han presionado para que vendan sus terrenos.

Según las autoridades de Planeación del ayuntamiento, el proyecto Nueva Tecámac incluye tres polígonos habitacionales y una zona industrial, y responde a la necesidad de plantear de forma anticipada la urbanización de las áreas que pueden ser habitadas. Sin embargo no han dado a conocer los terrenos que habrán de fraccionarse.

El diputado local perredista Javier Rivera Escalona denunció las presuntas irregularidades legales que se dieron en torno a la autorización del plan de desarrollo urbano del municipio de Tecámac por parte del gobierno municipal y del secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda estatal.

Informó que la fracción parlamentaria del PRD en el Congreso del estado de México propondrá la creación de una comisión que investigue las irregularidades en que incurrieron las autoridades estatales y municipales al autorizar este proyecto, sobre todo porque "sólo necesitó el gobierno estatal 24 horas, una vez que recibió el expediente".

El regidor Antonio Guízar Alarcón señaló que se opondrá a la construcción de las viviendas porque Tecámac no cuenta con la infraestructura para recibir tal cantidad de gente, además de que se afectarían las áreas de cultivo.

Según el padrón del ayuntamiento, en 1996 existían en Tecámac 35 mil casas habitación. Con la construcción de casi 35 mil casas, a partir de 1997 se duplicó a 70 mil.

El aumento de viviendas ha ocasionado problemas severos en la vialidad, ya que la carretera libre federal México-Pachuca registra una grave saturación. También los problemas de abasto de agua potable se han agravado.