México D.F. Miércoles 5 de mayo de 2004
El Coachella Fest devino plataforma anti Bush
Indio, California, 4
de mayo. Sin duda alguna fue un cartel
inmejorable el presentado el domingo pasado durante el segundo y
último día del Coachella Valley Arts and Music Festival.
No obstante, la nota la dieron los Flaming Lips, específicamente
su vocalista, quien aprovechando el gran número de gente que los
escuchaba, como preámbulo a la muchedumbre que vería a
The Cure cerrar la noche, los invitó a realizar una
votación consciente el próximo noviembre.
Ante un público virtualmente sorprendido y
que decidió aplaudirle su decisión, el vocalista
aseguró que no quería decir que 舠Bush se vaya a la
chingada, porque la gente votó por él. Pero sí
quiero decir: paren a Bush舡.
Tras una entrada triunfal dentro de un enorme
balón transparente que rodó sobre el público 舑y
que pidió que, por favor, todos dijéramos había
descendido del espacio舑, el cantante encomió a la gente de
California 舑舠donde estuvimos de gira cuando Arnold Schwarzenegger
ganó las elecciones y pues, bueno, me gustan algunas de su
películas舰舡舑 aunque, aseguró, debemos realizar el cambio
en noviembre, pues el hecho de que pudiéramos estar reunidos esa
noche era un triunfo de la libertad.
La noche anterior la banda holandesa The
(Internacional) Noise Conspiracy hizo lo propio, diciendo que ellos no
podían votar por su condición de extranjeros, pero
invitaron a que el público tomara conciencia y votara de manera
correcta, pues la decisión de ellos afecta a todo el mundo.
Tras su ejercicio cívico, la banda
siguió en medio de un desmadroso espectáculo franqueado
por un divertido zoológico de animales que bailó sobre el
escenario durante los 45 minutos de actuación que tuvo el grupo,
interpretando tan sólo cuatro canciones, pues el descenso de la
esfera del espacio y el discurso político no dejaron para
más.
Tras el desmadroso acto de The Flaming Lips,
llegó el momento de escuchar a la banda que clausuró el
concierto: The Cure, agrupación donde se percibe que el
hastío musical y el aburrimiento los han conquistado.
Pese a que el Coachella Fest 2004 llegó a
feliz término, The Cure necesita urgentemente una
transfusión de sangre.
MAURICIO MATAMOROS, ESPECIAL
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