Defendimos una ley de ingresos justa: PRD

De claroscuros, el primer periodo de sesiones en la Asamblea: PRI y PAN

GABRIELA ROMERO SANCHEZ

El PRD está en favor de la descentralización de los servicios de educación básica, "pero no con mañas ni trampas, sino con profesionalismo", advirtió desde la tribuna de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) el coordinador de la fracción perredista, René Bejarano Martínez, en clara alusión a la frustrada intentona de diputados federales de PRI, PAN y PVEM de recortar al gobierno capitalino 5 mil 344 millones de pesos del ramo 25, de educación pública, de las transferencias federales.

Ultimo en turno para presentar el balance de su partido sobre los trabajos realizados en el primer periodo ordinario de sesiones, Bejarano Martínez escuchó los discursos de sus homólogos del PRI, Manuel Jiménez, y del PAN, José Espina, así como del pevemista Arturo Escobar, para quienes el saldo es "de claroscuros", porque a pesar de que en algunos temas se logró llegar a consensos, en otros "imperó" la posición del jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador.

Bejarano espetó a los panistas que el proyecto del PRD "busca acabar con la pobreza, no con los pobres. Por eso defendimos una ley de ingresos que no crea nuevos impuestos inequitativos, sino que busca combatir la evasión y elevar la base de contribuyentes". Y a priístas y pevemistas, quienes insistieron en el asunto de la deuda, les dijo: "discrepo que sea exagerado el monto de la deuda de la ciudad de México. El estado de México adeuda 34 mil millones de pesos y sólo tiene 14 mil millones de ingresos propios cada año; sin embargo, su Congreso local autorizó 2 mil 400 millones de techo de endeudamiento. Es una desmesura venir a decir aquí que la deuda del DF equivale a una tercera parte de la deuda federal".

Agregó que la capital "tiene 44 mil millones de ingresos propios. Por eso rechazamos el hachazo infringido por revancha en contra de la ciudad; pero vamos a hacer un presupuesto ajustado, para que el DF tenga dinero suficiente para las obras; por eso se reformó la Ley Orgánica de la Contaduría Mayor de Hacienda y se aprobó por unanimidad el Código Financiero. Estamos por una reforma económica de fondo, no de cambios estructurales que se anuncian neciamente y no prosperan".

En tanto, el panista José Espina sostuvo que no todos los temas aprobados por el pleno de la ALDF gozaron del consenso de todos los grupos parlamentarios. "Los asuntos más delicados y trascendentes del ámbito de la administración pública y de las finanzas fueron conducidos bajo la directriz del jefe de Gobierno. Ejemplo de esto es la manga ancha que se le concedió para utilizar más de 77 mil millones de pesos de presupuesto de acuerdo a su conveniencia".

El coordinador del blanquiazul reconoció que se logró "la edificación de consensos", pero en el trabajo de esta legislatura "ha habido claroscuros", y advirtió que es necesario que el Ejecutivo local mejore su relación con la Asamblea Legislativa.

El líder priísta, Manuel Jiménez Guzmán, consideró que lo importante no sólo es "generar leyes, sino buenas leyes. Por eso al PRI le preocupa el nerviosismo legislativo, la sobrerregulación para cualquier tema, que pudiera llevar a corto o mediano plazo a un conflicto profundo de ordenamientos, reglamentos, disposiciones, acuerdos y leyes que impidan un sano desenvolvimiento de la ciudad en el futuro".

El pevemista Arturo Escobar aseveró que la ciudad de México no se merece un órgano legislativo "que apruebe a ciegas las instrucciones de quien ocupa la silla del poder Ejecutivo federal o local". Recordó el debate sobre la pensión universal para los adultos mayores: "Se decía que esa iniciativa del jefe de Gobierno ni con el pétalo de una coma se podía modificar".