.
Primera y Contraportada
Editorial
Opinión
El Correo Ilustrado
Política
Economía
Mundo
Estados
Capital
Sociedad y Justicia
Cultura
Espectáculos
Deportes
CineGuía
Lunes en la Ciencia
Suplementos
Perfiles
Fotografía
Cartones
La Jornada en tu PALM
La Jornada sin Fronteras
La Jornada de Oriente
La Jornada Morelos
Librería
Correo electrónico
Búsquedas

P O L I T I C A
..

México D.F. Viernes 2 de enero de 2004

Horacio Labastida

Grandeza del EZLN

Ideas bien expuestas sobre lo que significa el capital imperial y su expansión planetaria trazan las circunstancias históricas que rodearon la rebelión, en Chiapas, del EZLN. Eduardo Fioravanti explica que la internacionalización del capital significa la conversión del mundo en "una inmensa fábrica en la que los diferentes países no son más que secciones o talleres especializados en tareas muy concretas, pero imprescindibles para el cumplimiento del ciclo del capital", o sea, del proceso que maximiza ganancias y minimiza costos, situación que implica de los propietarios de los medios de producción un lento desprendimiento de sus sentimientos nacionalistas (véase El capital monopolista internacional, Barcelona 1976). En el texto el autor procura mostrar la necesidad de remodelar la ley del valor marxista en el capitalismo trasnacional, porque los precios que fijan en el mercado internacional los titulares del Estado y representantes de la oligarquía financiera no reflejan el trabajo socialmente necesario para elaborar mercancías y sí la defensa e incremento de utilidades.

En el Diccionario de economía y finanzas, de Ramón Tamames y Santiago Gallego (Madrid, 1994), se define imperialismo como "el dominio que sobre los países menos desarrollados se ejerce por los más avanzados de forma directa; por la violencia, o bien por métodos más sutiles de penetración económica, vía subordinación de las oligarquías nacionales a los intereses financieros", agregándose que muchos convienen en que el Congreso de Berlín de 1885 y sus antecedentes del poderío británico son considerados punto de arranque del imperialismo moderno. Por lo demás, Fioraventi, Tamames y Gallego nos recuerdan la caracterización del imperialismo que hizo Lenin en su célebre El imperialismo, fase superior del capitalismo (1916). Apuntadas la concentración del capital, la fusión de capital bancario e industrial en capital financiero y la exportación de capitales, Lenin advirtió que el imperialismo supone asociaciones internacionales monopolistas y reparto territorial del mundo por los diferentes imperialismos. Hoy, sin la URSS, el imperialismo estadunidense quiere tomarse para sí todo el planeta, de acuerdo con la política amenazante y tambaleante de George W. Bush.

La resistencia mexicana a la dominación política y económica imperial que se nos viene imponiendo en la era posrevolucionaria, fue escenificada por primera vez hace más de siete décadas, al registrarse una fuerte protesta contra los acuerdos adoptados por el gobierno de Alvaro Obregón en las conversaciones originantes de los supuestos Tratados de Bucareli (1923), cuya no aplicación del artículo 27 constitucional connotó una ignominiosa remisión de los principios fundamentales de la Revolución Mexicana. Al no reivindicar la patria sus esenciales recursos petroleros, la gloria liberadora viose oscurecida y prácticamente rechazada, a semejanza de lo que ocurrió en todos y cada uno de los países latinoamericanos.

Transgredir el ordenamiento jurídico y constitutivo promulgado en Querétaro por los revolucionarios entrañó y entraña un saqueo de la riqueza propia y una deshumanización de las poblaciones saqueadas. La opresión imperial succiona el patrimonio nacional por la vía de extinguir la personalidad del pueblo sometido por dos estrategias aniquilantes: la miseria generalizada y una ignorancia ilimitada que apaga la luz de la conciencia. La paradoja es aterrorizante: el imperialismo existe gracias a la transustanciación del no ser del hombre.

Y precisamente la rebelión contra esa radical negación de lo humano es bandera suprema y universal del EZLN. Consta así en la Primera declaración de la selva Lacandona, leída el 1Ɔ de enero de 1994, en plena batalla por un mundo justo, y en la Segunda declaración de la selva Lacandona (12 de junio de 1994), que invita a la sociedad a organizarse para impedir con su poder moral la inmoralidad del poder político. ƑSerá posible al poder moral derrotar al poder político inmoral? Probar que sí lo es con su rebelión de diez años contra la humillación del pueblo es la grandeza del EZLN.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año
La Jornada
en tu palm
La Jornada
Coordinación de Sistemas
Av. Cuauhtémoc 1236
Col. Santa Cruz Atoyac
delegación Benito Juárez
México D.F. C.P. 03310
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Email
La Jornada
Coordinación de Publicidad
Av. Cuauhtémoc 1236 Col. Santa Cruz Atoyac
México D.F. C.P. 03310

Informes y Ventas:
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Extensiones 4329 y 4110
Email