ƑLA FIESTA EN PAZ?

Leonardo Páez

2003, indignidades

POR DECIMO AÑO fue notoria la falta de competencia y, por consiguiente, la falta de mejores ofertas de espectáculo al público por parte del duopolio taurino que integran Espectáculos Taurinos de México, del exitoso en otros campos Grupo Bailleres, propietario de los 10 cosos más importantes de los estados, y de la incorregible Promotora Plaza México, de Miguel Alemán Magnani y su insustituible operador Herrerías.

DE LAS INOLVIDABLES tardes de David Silveti en la Plaza México en enero y febrero, a su suicidio el 12 de noviembre, "harto ya de estar harto", un desfile de indignidades caracterizó, también en lo taurino, al año mexicano que termina pasado mañana:

EL RIDICULO COLECTIVO del 5 de febrero, a cargo de un empresario tan autorregulado como intocable, de una figura española amafiada con éste, de un juez de plaza que no pudo devolver al toro del fraude, y de dos ganaderos que prefirieron hacerse los desentendidos.

LAS TIMIDAS SANCIONES por parte de la delegación Benito Juárez, al imponer a la empresa 100 mil pesos de multa por varias infracciones acumuladas y a Ponce la suspensión por un año para torear en la México, como si ello afectara la fortuna o la carrera del exquisito diestro o las arcas de la manirrota, con los de fuera, promotora. Ya compensaría la veleta delegación tan graves perjuicios al autorizar en octubre la venta y aumento del derecho de apartado a tan sobreprotegido "empresario".

LA INDIGNIDAD DE la Asociación Nacional de Matadores, cuyos miembros aceptaron, en marzo, la enésima imposición de Herrerías, al "elegir" a Luis Corona como representante, y quien queriendo servir a su patrón complicó el asunto de Ponce al no enviarle los citatorios de la delegación.

EL TARDIO COMIENZO de las novilladas, ante los estira y afloja del intocable con el Gobierno del DF, sobre todo para que le autorizaran el reglamento taurino más ridículo, por autorregulado, de que se tenga memoria, y la pobre cosecha del serial, siempre con encierros baratos, que si no es por el poblano Jesús Luján igual hubiera sido no darlo.

Y LA PLAZA más respetable, pero tan vacía como las demás, siguió siendo la de Guadalajara, con las corridas más serias, pero con combinaciones tan pobres como las de la "competencia".

LA EMPRESA MAS profesional, la de Dik Acha y Carlos Quintana, que en marzo ofreció una minitemporada en La Florecita, de Ciudad Satélite, con encierros muy bien presentados y combinaciones que generaron torerismo y rivalidad, pero cuyos triunfadores, obviamente, es fecha que no pisan la México.

EL GOBIERNO ESTATAL más comprometido con su tradición taurina fue Tlaxcala, que por medio de su eficiente coordinación de Desarrollo Taurino ha dado a la fiesta brava una dimensión y una difusión más allá de las corridas.

OTRAS SENSIBLES PARTIDAS fueron las de Alfredo Leal, los ganaderos Manuel de Haro y Agustín Chávez, el aficionado Pedro Yllana y la inolvidable Gloria Rizzo.