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México D.F. Lunes 29 de diciembre de 2003

Considerada patrimonio de la humanidad desde 1978 por la UNESCO

Wieliczka, la mina de sal más antigua, es recinto cultural y de sanación para males respiratorios

JUAN TRUJILLO LIMONES ESPECIAL

Wieliczka, Polonia. Condimento esencial desde hace muchos ayeres, la sal tiene una producción legendaria en la mina de Wieliczka, al sur de Polonia, la cual, visitada por jefes de Estado y personalidades como Nicolás Copérnico, Goethe, Chopin y el Papa Juan Pablo II, es considerada patrimonio de la humanidad por la UNESCO desde 1978.

Wieliczka, que data del siglo XIII, es la mina de sal más antigua y uno de los principales sitios donde se produce en el mundo. Hoy día es también un centro cultural y de diversión que reúne a amigos y familiares en bodas, fiestas y celebraciones religiosas, así como a turistas de todos los lugares del planeta. De importante valor histórico, este lugar ha recibido más de 700 mil turistas por año desde 1960.

En este diciembre se efectuó la sexta competencia de representaciones teatrales sobre la Navidad, y el día 24 los mineros y sus familias bajaron a la capilla Santa Kinga para rezar y presenciar la misa del Pastor, con la finalidad de dar la bienvenida al Señor renacido.

Recinto que acoge conciertos y exposiciones de escultura, pintura o fotografía, o formación geológica, o elemento salino de sanación de problemas respiratorios, la mina de sal de esta ciudad es parte fundamental de la cultura de la Europa oriental.

Wieliczka se encuentra a escasos 10 kilómetros al este de Cracovia, una de las ciudades más bellas de Europa y antigua capital de Polonia, con un legado histórico de mil años, que maravilla a los visitantes por su cultura. En esta ciudad minera el transporte tiene semejanza al latinoamericano entre ciudades pequeñas: hay microbuses al servicio de estudiantes y turistas interesados en conocer la famosa leyenda salina.

El oro gris

Laberintos, corredores, pozos, conductos, lagos, cavernas y cámaras forman el subsuelo de Wieliczka; inclusive los límites de los accidentes geológicos rebasan el perímetro de esta ciudad. Surgieron hace siete siglos a expensas de la constante evaporación de agua. La sal fue el oro gris que, por si fuera poco, significaba un tercio de los ingresos que los gobiernos reales percibían en el siglo XIV y es desde entonces ingrediente de todo comensal en el mundo. La sal ordinaria y la dietética trabajadas por la empresa que controla la mina gozan de buena reputación en el mundo.

El viaje subterráneo dura tres horas y se inicia en la entrada a una casa modesta y sencilla. El recorrido es de 350 kilómetros en total, por medio de un laberinto de galerías de explotación y cámaras construidas en el siglo XVIII. No obstante, la ruta abierta para visitantes es solamente de 2 kilómetros y atraviesa 20 salas, situadas en tres niveles, desde 64 hasta 135 metros bajo tierra; se pueden observar lagos de agua salina, capillas esculpidas en sal y lámparas hechas también del mineral. En cuanto al clima, en verano se registran temperaturas de 15 grados centígrados, y en invierno la atmósfera se vuelve más cálida, debido a los factores de humedad y sequedad en cada estación.

En Polonia históricamente los obreros expresan su fe en sus centros de trabajo. El 4 de diciembre, como cada año, se celebró el día de Santa Bárbara (Barbóka), patrona e inspiración de los mineros polacos. Durante las festividades se entregaron premios a los mineros por su labor durante el año. La celebración es acompañada por una fiesta con canciones que hacen referencia a su vida cotidiana.

Esta mina es uno de los testimonios del origen de la industria minera en Europa y quizá antecedente directo de organización laboral en la región, pues su agrupamiento se remonta a 1690 (Podlecki, Janusz Wieliczka Real Mina de Sal). Asimismo es símbolo de identidad entre los mineros, quienes con gran sensibilidad desarrollaron formas de expresar su amor al trabajo y fe religiosa. Prueba de ello está en las diversas esculturas que representan alguna figura o escena de la Biblia. La Ultima Cena o el juicio de Herodes se encuentran representados de manera imponente en la capilla Santa Kinga. El trabajo artístico, que destaca por la sencillez y el detalle de las obras, data de 1697, cuando un devastador incendio dejó como experiencia el trabajo con el mineral. Cercanos a la escalera que conduce a turistas se encuentran los afamados duendes, quienes parecen ser no sólo guardianes de los bosques, sino también de tesoros secretos y anuncios de peligros potenciales en el interior de la mina, asociación que los mineros han promovido por los riesgos que existen.

La presencia de agua corriente en el interior de la mina ha sido benéfica desde el punto de vista de la cristalización de la sal, ya que de manera majestuosa es el ornamento natural al formar columnas con la unión de estalactitas y estalagmitas. De manera sorprendente se aprecian utensilios y escaleras plagados de cristales de sal que semejan diamantes.

Vida subterránea

El recorrido, aunque un tanto agotador, pone de manifiesto la capacidad del hombre por mantener sistemas de ventilación, drenaje y electricidad desde tiempos remotos. No es raro encontrarse con una oficina de correos, un restaurante, sanitarios, tiendas, un pequeño cine y hasta un centro deportivo en el que se pueden practicar tenis, basquetbol y voleibol. En las grandes salas se celebran, previa cita, conciertos, bodas y bailes, y se representan obras de teatro. Las bajas temperaturas del nivel tres no han sido impedimento para la existencia del museo de la Minería, que exhibe antiguas herramientas y textos que narran la historia de dicha industria.

Propiedades curativas

El aire que se respira en la mina contiene sal disuelta, la cual posee propiedades curativas. En el nivel número cinco, es decir, a 211 metros bajo tierra, son atendidas personas con problemas respiratorios; en el lugar pueden permanecer siete horas diarias. Algunas alergias y el asma bronquial son padecimientos que se combaten en este sitio desde 1964 con resultados positivos. Ser sanatorio es otra alternativa de uso de la mina de sal para beneficio de la población de Wieliczka.

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