Inocentada en el antiguo Palacio

En el Día de los Santos Inocentes, Andrés Manuel López Obrador hizo de las suyas.

Apenas inició su conferencia mañanera, alardeó ante los reporteros de su relación con El Innombrable. Su gesto adusto y el tono serio y firme de su voz atrajeron de inmediato la atención:

"Me habló por teléfono un personaje muy importante, El Innombrable, para decirme que no me preocupara, que ya estaba arreglando las cosas con los diputados para que hoy se autorice el techo de endeudamiento de 2 mil 500 millones de pesos que solicitamos."

Las preguntas no se hicieron esperar: ƑCómo fue?... ƑConfía en él?...

La respuesta también fue inmediata: "pues sí, yo creo que esto se va a llevar a cabo el día de hoy, una vez que regrese la Ley de Ingresos a la Cámara de Diputados...."

Y cuando el pasmo de los reporteros era tal que no alcanzaban a hilar la siguiente pregunta, López Obrador estalló en risas que lo llevaron hasta golpear el atril. Pocos entendían lo que pasaba, hasta que el jefe de Gobierno soltó: "inocentes palomitas, hoy es día 28..."

Y ahí quedó el asunto, no quiso que el chasco fuera más allá y empezó en serio la conferencia en el antiguo Palacio del Ayuntamiento. Pero la broma estaba hecha...