Algunas medidas podrían perjudicarnos, sostienen

Empresarios independientes se ampararían contra las reformas

DAVID ZUÑIGA Y MIRIAM POSADA

A medida que PRI y PAN se acercan a un proyecto fiscal similar al planteado por la cúpula del sector privado, dirigentes patronales advirtieron que algunas medidas podrían perjudicar a empresas y trabajadores, sobre todo a los que reciben prestaciones sociales. Mientras, empresarios ajenos a los organismos cupulares anunciaron que interpondrán amparos y se sumarán a las movilizaciones en contra de esta reforma y la del sector energético.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Héctor Rangel Domene, afirmó que al sector privado le suena "bastante bien" la propuesta del PRI de reducir el impuesto sobre la renta (ISR) a las personas físicas y a las empresas; asimismo, reiteró que generalizar el IVA no tendrá efectos inflacionarios y, de haberlos, éstos se diluirán rápidamente.

Rangel dijo estar en desacuerdo con los escritores y editores que exigen mantener la exención a libros, periódicos y revistas. "ƑY por qué los cómics no?", preguntó con ironía el ex banquero. "Claro que los escritores tienen sus razones. Si yo fuera productor de libros diría que no me pongan IVA, pero en bien de la patria, de la nación, de los intereses de todos los mexicanos necesitamos olvidarnos de esos privilegios".

Se le comentó que quienes parecen ajenos a este afán patriótico son los empresarios que gozan de privilegios fiscales al consolidar las ganancias de sus empresas, recibir ingresos por dividendos o realizar transacciones bursátiles y exportaciones. A ellos, arguyó, no hay que cobrarles más sino bajarles el ISR porque de otra forma tendrán más incentivos para evadir impuestos o llevarse sus capitales y el país perderá competitividad.

Por su parte, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Luis Barraza, dijo que los empresarios están dispuestos a asumir "el costo económico" de la reforma y señaló que la propuesta del PRI es "el complemento que le faltaba" a la iniciativa del PAN sobre el IVA.

En conferencia de prensa se entregó un estudio supuestamente basado en cifras del INEGI, según el cual cobrar un IVA de 5 por ciento prácticamente no tendría efecto en 10 por ciento de la población más pobre del país, que sólo terminaría gastando 4.09 pesos más al mes.

No obstante, el presidente de la Comisión de Asuntos Tributarios de la Coparmex, Oscar Soriano, reconoció que las reformas a la ley del ISR podrían afectar a empresas y trabajadores, pues se grava-rían prestaciones, como vales de despensa y fondo de ahorro, y ello influiría en el salario integrado que las empresas reportan al IMSS. En total, estimó, las nuevas disposiciones podrían aumentar hasta en 2.5 por ciento el costo de nómina de los negocios. Sin embargo, dijo Soriano, los trabajadores de clase media se verían compensados con una baja en la tasa del ISR, que pasaría de 34 a 25 por ciento.

La Asociación Latinoamericana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Alampyme) advirtió que ''20 mil de sus 40 mil socios'' interpondrán amparos en caso de aprobarse la propuesta de generalizar el IVA, por considerar que viola los principios constitucional de equidad y proporcionalidad tributarias. El representante de la Alampyme, Pedro Salcedo, acusó al gobierno de haber elegido la vía del "menor esfuerzo recaudatorio''.