Propone reducir de 33 a 30 por ciento el ISR a empresas y 25 para personas físicas

Plantea Fox 10% de IVA generalizado, incluidos los alimentos y las medicinas

Asegura que el gobierno compra 60% de los fármacos y los regala a los más pobres

JUAN MANUEL VENEGAS

La iniciativa fiscal que el Ejecutivo federal enviará hoy al Congreso propone la reducción del IVA de 15 a 10 por ciento, su aplicación en todo el país e incluir medicinas y alimentos; de igual forma plantea la reducción del impuesto sobre la renta (ISR) a las empresas de 33 a 30 por ciento, y para las personas físicas a 25 por ciento, informó ayer el presidente Vicente Fox Quesada.

Descartó que la propuesta de gravar medicinas y alimentos pudiera provocar manifestaciones de inconformidad social. Primero, porque en México hay una ''gran institucionalidad'' y las cosas se resuelven por la vía de la ''gobernabilidad democrática''; segundo, porque ''seguramente los pobres aportarán 10 por ciento (en fármacos y comida), pero se van a llevar 100 por ciento de la recaudación, que irá de regreso en educación gratuita, seguro popular, carreteras, combate a la pobreza y hambre cero'', y tercero porque 60 por ciento de todas las medicinas que se consumen en el país las compra el gobierno federal para ''entregarlas gratuitamente a toda la población, precisamente a la más pobre, a través del sistema de salud abierto, del IMSS, del ISSSTE''.

Propuesta ''sensata y sólida''

Se trata, pues, de una propuesta ''sensata y sólida'', que de ''ninguna manera significará hacer más pobres a los pobres... ¡todo lo contrario! Si va a haber una reforma es para que los pobres tengan mejores condiciones de las que hoy tienen''.

Fox se reunió ayer por la mañana en Los Pinos con los corresponsales extranjeros. La idea era adelantar algunos de los asuntos que abordará en la gira de tres días que se inicia este martes por el sur de Estados Unidos; sin embargo, desde el inicio mismo de la conversación, el mandatario hizo la presentación de los dos temas que ''más les interesan'', poniendo por delante el trabajo que se viene realizando para las reformas fiscal, hacendaria, eléctrica y laboral.

-¿No teme que si pone IVA a medicinas y alimentos pueda provocar algún signo de inconformidad social, visto que las medicinas en este país son tan caras y muy poca gente tiene cobertura en el Seguro Social? -se le preguntó entonces, casi en seguida a su presentación.

-México tiene y goza de una gran institucionalidad y ésta se ha fortalecido en los tres años de mi gobierno. Hemos podido procesar todos los temas, los muy difíciles como los menos complicados. Así hemos salido adelante con el asunto de los indígenas y del EZLN, al inicio de mi gobierno... mucha gente pensó que iban a suceder asuntos de inestabilidad y no pasó nada. (También) hemos tenido problemas importantes en los productos agropecuarios, en el café, en el azúcar, y cada uno se ha resuelto. No hay manifestaciones ni cierres de carreteras ni nada complicado... nuestra guía es la gobernabilidad democrática, es el diálogo, es la negociación.

''Así se resolvió Atenco; así se resolvió, a través del pacto, el gran Acuerdo Nacional para el Campo, y así vamos a resolver los asuntos hacendarios del país'', apuntó el mandatario.

Y luego llegaron los argumentos ''sociales'' para justificar la iniciativa de generalizar el IVA a medicinas y alimentos: ''A los pobres se les regresará el ciento por ciento de la recaudación... pues los recursos que se obtengan van precisamente para reducir la pobreza en el país''.

Por otro lado, respecto de la reciente elección del Consejo General del IFE, Fox señaló que ha cumplido ''plenamente con el ejercicio parlamentario mexicano y con nuestras leyes, que marcan cómo se deben nombrar esos consejeros... y a mí me parece que la democracia, para que sea efectiva, tiene que operar a base de mayoría; idealmente, que se den los consensos; pero la mayoría es un camino claro para fortalecer a una democracia''.

En ese sentido reiteró su aval a los nuevos consejeros: ''Nosotros aceptamos, reconocemos y respetamos este resultado que sacó el Congreso''.

Ya sobre los temas de la gira a Estados Unidos (Arizona, Nuevo México y Texas) y el fenómeno migratorio, en concreto, el Presidente aclaró -a pregunta expresa- que a pesar de la recomendación que le hizo el Senado de aprovechar para reclamar los malos tratos a los trabajadores mexicanos, en esta ocasión no se trata ''ni de exigir ni de reclamar'', sino de ''construir, platicar y desarrollar un proceso de avance en el tema de migración en la ruta más importante para nosotros''.

Incluso, al referirse al tan mencionado acuerdo migratorio, cambió radicalmente su discurso con el que inició su administración hace tres años, en el que todavía insistía hasta hace un año. ''Creo que no debemos construir expectativas más allá de lo que es la realidad; tenemos que mantener los pies en el piso y ser cuidadosos, porque llevamos meses donde no hubo avance alguno...'' No obstante, consideró una buena señal que en la reunión binacional que se inicia el próximo 12 en Washington se vuelva a poner el asunto sobre la mesa.

Más tarde, al inaugurar la Convención Nacional de la American Chamber México, el presidente Fox hizo un llamado al sector público y empresarios de los tres países del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) a ''cerrar filas para enfrentar la competencia, no siempre leal, de otras naciones que colocan productos en nuestros mercados sin ofrecer reciprocidad a cambio'', así como buscar ''las asociaciones, las alianzas que permitan a nuestros países alcanzar un alto grado de competitividad, crecimiento económico y estabilidad''.

Asimismo, el presidente Fox comió en privado con los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial (CEE), con los que platicó del curso que llevan las negociaciones para las reformas, fiscal y del sector eléctrico.