Fueron arrestados dos sospechosos; refuerzan tropas de EU los patrullajes en Tikrit

Grave, consejera iraquí herida en ataque de la resistencia en Bagdad

Al menos seis personas emboscaron a Akila al Hashimi, ex funcionaria del régimen de Hussein

Soldado mata a balazos a tigre de Bengala que atacó a compañero en el zoológico de la capital

ROBERT FISK ENVIADO

Bagdad, 20 de septiembre. La resistencia en Bagdad atacó este sábado a una de las únicas tres mujeres que integran el consejo de gobierno iraquí auspiciado por el gobierno de Estados Unidos. Akila al Hashimi, musulmana del sector chiíta, quien solía trabajar para el Ministerio del Exterior del régimen de Saddam Hussein, resultó gravemente herida.

Al menos seis pistoleros, quienes viajaban a bordo de dos automóviles, emboscaron a Hashimi afuera de su residencia en Bagdad, esta mañana, disparando con rifles Kalashnikov y arrojando al menos una granada contra el vehículo que ella abordaba.

El chofer de la consejera reaccionó refugiándose de nuevo, a toda velocidad, en la cochera.

Al Hashimi, quien tenía proyectado ir próximamente a la sede de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, con una delegación iraquí para buscar que su país tuviera representación en la Asamblea General, sufrió he-ridas en el abdomen y fue llevada al hospital Yarmouk, de Bagdad.

Después de ser sometida a cirugía de emergencia fue trasladada, bajo estricta protección de soldados estadunidenses, a un hospital militar instalado por las fuerzas de ocupación en las afueras de la capital del país árabe.

Su condición es todavía crítica. Se informó que al menos dos de sus guardaespaldas también resultaron heridos en el atentado.

Marea que crece día a día

Durante los pasados días los soldados estadunidenses en Bagdad han tratado de pronosticar los movimientos del cada vez más grande ejército de la resistencia, y han construido barreras de concreto en torno a lo que el ejército de ocupación considera blancos: hoteles, bases estadunidenses y puentes sobre el río Tigris.

Asimismo, las temerosas tropas de Estados Unidos se han dedicado a disparar contra civiles sólo por la simple sospecha de que po-drían ser hostiles.

El administrador civil de Irak, el estadunidense Paul Bremer, de-signó al consejo de gobierno iraquí como medida interina, antes de que puedan realizarse elecciones que decidirán la futuro administración política del país.

Dos tercios del organismo están integrados por iraquíes que regresaron del exilio o por líderes kurdos, y las decisiones que éstos to-man son secretas.

Al Hashimi era el único miembro del depuesto régimen a quien se permitió formar parte del nue-vo consejo de gobierno.

La funcionaria fue colega de Ta-rek Aziz, uno de los principales asesores de Saddam. También es-tuvo íntimamente involucrada en el programa petróleo por alimentos, que surgió luego de las sanciones de la ONU contra Irak, im-pulsadas por Estados Unidos.

Se supone que dos hombres ya han sido arrestados en relación con el ataque. Sin embargo, estas detenciones suelen anunciarse con el único fin de aplacar a la opinión pública, porque poco después se informa que los sospechosos fueron liberados.

La guerrilla, en ascenso

El ataque contra Al Hashimi ocurrió sólo dos días después de una emboscada y un tiroteo, la noche del jueves anterior en Tikrit, que mató a tres soldados estadunidenses e hirió a dos más.

Cincuenta y ocho iraquíes fueron detenidos después de estos ataques, que están entre los más feroces y mejor planeados de la ascendente resistencia.

Este sábado, tanques y vehículos blindados de combates estadunidenses circulaban por todos los sectores de Tikrit para demostrar una fuerza con la que se intenta disuadir los ataques y atemorizar a la guerrilla.

Mientras, un soldado estadunidenses mató a tiros a un tigre de Bengala, especie en peligro de ex-tinción, en el zoológico de Bagdad, después que el animal mordió a un compañero que intentó alimentarlo a través de las rejas de la jaula.

El administrador del zoológico dijo que un grupo de soldados de Estados Unidos hizo una fiesta ahí la noche del jueves, después de que el parque cerró al público.

"Alguien trató de darle de co-mer a los tigres -dijo-. El animal le arrancó el dedo al soldado y le clavó las garras en el brazo. Su compañero, al ver lo que estaba sucediendo, tomó un arma y le disparó al tigre de Bengala".

No hubo comentarios inmediatos sobre lo anterior por parte de las autoridades de ocupación de Estados Unidos.