HACIA LA CUMBRE DE CANCUN

Las autoridades proponen a los manifestantes rutas lejos de la zona hotelera

Se alistan mil ONG para llegar a la sede

Las organizaciones quieren encarrilar la reunión de la OMC en una opción distinta: SRE

AFP Y NOTIMEX

31 de agosto. Cerca de mil organizaciones no gubernamentales (ONG), 242 más que en Seattle, se alistan a desembarcar en el balneario mexicano de Cancún con el objetivo de hacerse escuchar por los 146 ministros de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Oficialmente son 980 las ONG autorizadas, en comparación con las 738 que hubo en Seattle (1999), donde las pláticas de la reunión ministerial fracasaron en su objetivo de abrir una nueva ronda multilateral de negociaciones comerciales.

El comité organizador mexicano, junto con la OMC, ha garantizado un centro propio para las ONG en un hotel de la ciudad y todo tipo de facilidades para sus actividades, explicó Melba Pría, responsable de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para las organizaciones sociales.

La OMC es uno de los blancos favoritos de organizaciones como Greenpeace o la Vía campesina, empeñadas en denunciar lo que consideran desastres de la liberalización comercial.

La forma en como se plantee en Cancún esa visión alternativa de la mundialización puede influir decisivamente en los trabajos de la reunión ministerial, que afronta una agenda muy cargada en Cancún.

Las ONG han organizado, entre diversas actividades, el Foro de los Pueblos, programa alternativo a la reunión oficial, y dos grandes manifestaciones: el día 10, convocada por las asociaciones y sindicatos campesinos, y el 13 la gran marcha final de todas las agrupaciones.

Hasta ahora se tienen registrados 3 mil delegados de 83 países. De las organizaciones participantes, cerca de 35 por ciento son redes internacionales como Greenpeace (medio ambiente) u Oxfam (lucha contra la pobreza), y el resto son agrupaciones nacionales, según datos de la cancillería mexicana.

Algunas de ellas, como la Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio (Remalc), han señalado: "abiertamente decimos que sí queremos descarrilar la agenda trasnacional de la OMC. Eso significa luchar por las propuestas que las organizaciones civiles y muchos gobiernos del tercer Mundo están planteando", explicó recientemente en rueda de prensa Alejandro Villamar, de la Remalc.

La respuesta del gobierno mexicano ha sido hasta el momento conciliadora: "creo que las ONG lo que quieren es más bien encarrilar la OMC en una opción distinta", señaló Melba Pría. "Hay libertad de expresión en México y nosotros la respetamos fundamentalmente", explicó en su momento el canciller Luis Ernesto Derbez.

Algunas ONG han afirmado su intención de llegar hasta el mismo Centro de Convenciones de Cancún, donde se celebrarán las sesiones de la OMC.

Las autoridades locales del balneario (destino de 2 millones 820 mil turistas en 2002) proponen cinco rutas para las manifestaciones, todas ellas lejos de Centro de Convenciones, que está en la zona hotelera.

"Esperamos que no haya violencia. Ya hemos hablado con algunas organizaciones y éstas se han manifestado por una movilización pacífica", aseguró Pría.

Las manifestaciones diarias en Seattle contribuyeron al fracaso de las negociaciones de la OMC, mientras que en otras citas de organismos como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, en Washington (2000) o Praga (2001), la violencia y la represión policial fueron dominantes.

"Hay que partir de un hecho: las ONG son un abanico amplísimo, nadie tiene control sobre ellas", advirtió Alejandro Calvillo, académico y militante de Greenpeace México, para quien la violencia podría estar presente en Cancún, aunque "no seremos nosotros los que la estaremos promoviendo", aseguró.