México D.F. Viernes 8 de agosto de 2003
Historia de milenio y variedad
Hace 9 mil años, cuando los cazadores y recolectores que habitaban el territorio de lo que hoy es México descubrieron la planta madre del maíz o teocintle -muy pequeña y con pocos granos-, ésta ya había perdido la capacidad para esparcir sus semillas.
Cultivándola y cultivándose con ella concibieron la agricultura y la vida comunitaria en las primeras aldeas. En compañía del maíz forjaron en Mesoamérica varias de las principales civilizaciones del planeta.
Con el tiempo produjeron el mayor cambio de forma que cualquier planta cultivada haya experimentado y la adaptaron a una diversidad geográfica mayor que la de cualquier otra.
Durante milenios los campesinos de cada lugar han mejorado el maíz mediante una paciente selección de semillas. México es centro de origen del maíz y se distingue por la riqueza y diversidad de sus innumerables razas y variedades.
Según el nicho ecológico al que pertenezcan, las plantas pueden ser de menos de un metro hasta cuatro metros de altura, rojas o verdes. Pueden tener panojas de un solo eje o con muchas ramificaciones.
Las hojas pueden ser angostas o anchas, con vello o lampiñas y variar en número de ocho hasta 48. Las mazorcas pueden ser cortas y delgadas o largas y gruesas, desde diez hasta más de 60 centímetros de largo.
Pueden tener desde ocho hasta más de 24 hileras de granos, de los que hay de distintos colores y tamaños. Una variedad en Perú da granos de hasta tres centímetros de diámetro.
Los granos en una mazorca pueden ser unos cuantos o hasta más de mil, con un promedio de 300 a 500. CON INFORMACION DEL MNCP |