Dos menores de edad, entre los cómplices
Detienen a otro miembro de la banda de robacoches Los Ventura
ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ
La familia de los Ventura, conocidos entre los comerciantes de refacciones de Iztapalapa por dedicarse a "pegarle al peligro" (pues la mercancía que venden es robada), persisten en lo que parece ser un negocio de familia, no obstante que varios de sus miembros están en la cárcel. Ayer otro de ellos fue detenido junto con su esposa y sus dos hijos, ambos menores de edad.
Ayer, casi tres años después de que la Policía Judicial del Distrito Federal anunció el desmantelamiento de la banda de Los Ventura, fue detenido Carlos Avila Ventura, de 31 años de edad, cuando conducía un vehículo con reporte de robo en pleno centro de Tlalpan.
Agentes judiciales adscritos a la Coordinación Territorial Tlalpan 3, gracias a sus investigaciones, ubicaron el lugar, en la delegación Iztapalapa, al que llevaban los autos robados para desmantelarlos, así como el establecimiento donde se les comercializaba.
La historia no es nueva. Cuando cuatro integrantes de la familia, Luis, Elvia, Leticia y Arturo Ventura Olmedo, fueron detenidos en abril de 2000, se ubicaron por lo menos cuatro refaccionarias en las que vendían las autopartes robadas.
Carlos Avila conducía los autos a dos predios de la calle Bisorta, en los números 9 y 10, en la colonia El Manto, de Iztapalapa, donde los desmantelaba con ayuda de sus cómplices, dos de los cuales lograron huir durante el operativo.
Posteriormente, el sujeto trasladaba las autopartes a su negocio, llamado Refaccionaria Sharriot, ubicado en la calzada Ermita Iztapalapa número 212, colonia Barrio de San Lucas, donde su esposa, Michel Segura Fernández, y sus dos hijos, de 14 y 15 años, vendían la mercancía.