CIUDAD PERDIDA

Miguel Angel Velázquez

Los cohetes de la CID

ESTE ES UN aviso a tiempo. Hace unos dias, en este espacio dimos cuenta de la formación de un par de frentes ciudadanos que, entre otras cosas, habían logrado una organización política desde la que, sin partido y sin color, tendrían un candidato por consenso para ofrecer a los partidos que se plegaran a su programa.

DEBO DECIR QUE la noticia, más que sorprenderme, me entusiasmó. Pensar en una madurez política de ese tamaño era hablar de otra ciudad. Saber que existe una posibilidad más allá de la necedad de los partidos políticos por imponer candidatos, sin importar la opinión de sus militantes de las delegaciones, parecía algo increíble.

AUNQUE HASTA EL momento, y pese a las noticias que he recibido, me he negado a creer que todo esto sea una farsa, debo reconocer que las organizaciones ciudadanas siempre estarán en desventaja frente a las corrientes políticas militantes, por los recursos que manejan y la experiencia del trabajo partidista.

POR EJEMPLO, UNA parte del frente de Iztacalco está siendo absorbida por la Corriente de Izquierda Democrática (CID) del PRD, que trata de imponer al diputado Emilio Serrano como candidato por esa delegación.

DEBIDO A ESTO, la agrupación de vecinos podría dividirse y dar al traste con el trabajo desarrollado hasta ahora. Y lo que es más grave, llevaría a la decepción a un buen número de personas preocupadas por el desarrollo de su demarcación.

MAS ALLA DE las notas periodísticas aparecidas ayer sobre la trifulca escenificada durante el informe de la delegada en Iztacalco, Elena Tapia, un lector de este espacio, el señor Perseo Ibarretxe, me cuenta que fue testigo de cómo algunos de los rijosos fueron manejados por Emilio Serrano y son parte del frente de Iztacalco. El hecho desde luego afectará a la organización ciudadana, pues con ello pierde el prestigio que le dio estar lejos de los intereses de las corrientes partidistas.

PERO NO ES el único caso. En Milpa Alta, según me escribe Rodrigo Avila, las cosas no van por diferente camino. Allá donde la CID trata de imponer a Sombrita -un diputado local gris e incapaz- también se trata de cooptar al frente de ciudadanos milpaltenses.

EN ESTE CASO, según me dice el señor Avila, hay doble jugada porque no sólo se quiere condenar a la delegación a cargar con Sombrita, sino que se pretende llevar a Guadalupe Chavira, la delegada actual, reprobada por los habitantes del lugar, a una diputación federal.

YO SE QUE en política todo, o casi todo, se vale. Pero esta vez en uno y otro lugares la CID pretende engullirse, de cualquier forma, la organización de los vecinos que, por otra parte y afortunadamente, ya se han dado cuenta de por dónde suenan los cohetes.

LO MALO DEL asunto es que una vez más será el PRD quien pague por las trampas y el juego sucio de la CID. šA ver hasta cuándo!

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