José Steinsleger
De hormigas, ranas y renacuajos
Hojeaba el periódico Regeneración de Ricardo Flores Magón, aquel mexicano de fina madera que murió hace 80 años en una cárcel de Estados Unidos, cuando supe del libro Cambiar el mundo sin tomar el poder, de John Holloway. ƑDónde había oído o leído de tal pretensión? ƑEn Saint-Simon, Proudhon y Fourier? Entonces me puse a meditar en hormigas, ranas y renacuajos.
Todas las épocas y sociedades han conocido individuos de aliento evangélico, convencidos de que la historia de la humanidad ha sido la de las hormigas negras contra las hormigas rojas. Y a la cultura eurocéntrica le encanta explicar cómo funciona el mundo. El "buen salvaje" sigue fascinando al intelectual del mundo rico y el del mundo pobre le oye embobado, sin reparar en que sus enfoques persisten en analizar lo particular desde lo general. Reduccionismo autorreferencial que alimenta la confusión de una izquierda que anda algo despistada.
Hace unos meses, la autora de No logo, Noemí Klein, me reconoció que poco sabía de historia política argentina antes de su viaje de inspección al país rioplatense. Y en entrevista con este diario, Toni Negri, uno de los autores de Imperio, decía que "...los barrios obreros que se habían vivido como espacios de lucha fueron desmantelados (La Jornada, entrevista, 12/07/01)". No aclaró si hablaba de los barrios italianos o del mundo.
ƑConocerá Negri de las experiencias barriales de los trabajadores que administran el supermercado Tigre en la ciudad argentina de Rosario y las de San Francisco Solano, localidad que agrupa cientos de barriadas del suburbio de Buenos Aires? ƑQué pensará de la entrega de 80 diplomas a dirigentes piqueteros capacitados por la Central de Trabajadores (CTA) en el salón Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional? ƑCreerá que estos hechos surgen de la "espontaneidad" política, de la nada histórica?
No se trata de negar per se las creaciones del mundo europeo. Se trata de auscultar en el incumplimiento del itinerario emancipador que prometía su proyecto de modernidad. ƑQué si hoy estamos "conectados"? Mejor. Para que de una vez se entienda que una cosa es "cambiar el mundo" en Europa y otra muy distinta es hacerlo en Colombia o Nezayork.
John Holloway dice: "...la única manera en la que hoy puede imaginarse la revolución es como la disolución del poder". Padrísimo. Sólo que en estas latitudes la "revolución" pasa por el desatino (Ƒ"neopopulista"?) de comer tres veces al día. Y para esto hay que forjar alianzas políticas de escaso glamur rebelde. De lo contrario podría pasarnos lo que a Danny el rojo, aquel del mayo parisino que se convirtió en verde cuando se quedó sin imaginación para tomar el poder, o el Jerry Rubin de Do it!, quien de "la acción es lo que cuenta" acabó contando acciones en la Bolsa de Wall Street, y el foquista Regis Debray, quien dejó de hablar del fascismo cuando descubrió el "marxismo autoritario", y el proto-hippie Bob Dylan, que al papa Juan Pablo II le hizo caer la babita cantándole Blowing in the wind.
ƑConque el imperialismo se ha desterritorializado a tal grado que sólo cabe hablar de Imperio sin más? šRecórcholis, Verónica! ƑQué nombre le pondrán al guión de la "novísima" izquierda europea? ƑNegri & Hardt vs. Picard (el comandante de Viaje a las estrellas)? Pregunta por 64 millones: Ƒel posmarxismo surge de haber superado a Marx o siempre fue ex marxista?
El eurocentrismo nunca entendió muy bien el fenómeno imperialista. Compañeros: Ƒqué imperio global? Estados Unidos controla 48 por ciento de las mayores compañías y bancos en el mundo, la Unión Europea 30 por ciento y Japón 10 por ciento (Financial Times, 10/05/02). La idea de que el Estado-nación ha muerto (paradójicamente compartida por neoliberales y globalifóbicos) es indemostrable, virtual, contrarrevolucionaria y carente de contenido teórico.
La lucha incesante de América Latina ha sido contra las oligarquías serviles de los yanquis. Y la trágica balcanización de los estados-nación, consecuencia histórica del colonial-imperialismo concreto. Sus problemas "premodernos" empezaron con la conquista, los "modernos" con el expansionismo de Washington y los "posmodernos" con la puesta al día de la Doctrina Monroe (1823): la llamada Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), diseñada para vetar cualquier pretensión de imperio global alguno.
Por último, contradicciones de tipo ciudadanos corrientes vs. héroes puros (Holloway) son típicas de la derecha insidiosa y la izquierda abstracta, pues ambas invitan al olvido de quienes fueron, de Flores Magón al Che, ejemplo de consecuencia y compromiso.
Al eurocentrismo hay que responder, como dice el tango, que "...nos están sobrando los consejos". Y a estas alturas, cabe la fábula de Stevenson:
"Debería darte vergüenza -dijo la rana-. Cuando yo era renacuajo, no tenía cola.
"Es lo que yo pensaba -dijo el renacuajo-. No has sido nunca un renacuajo."
