Washington presenta su proyecto de resolución
sobre Bagdad al Consejo de Seguridad
Irak puede ser desarmado sin guerra, pero el fin es
deponer a Hussein: Bush
Premios Nobel de la Paz repudian el uso de la fuerza
para la solución de conflictos
REUTERS, AFP, PL Y DPA
Washington, 21 de octubre. El presidente de Estados
Unidos, George W. Bush, aseguró hoy que Irak puede ser desarmado
pacíficamente y que él está dispuesto a darle una
nueva oportunidad a la diplomacia, pero reiteró al mismo tiempo
que el objetivo de la política estadunidense hacia Bagdad es lograr
un cambio de régimen.
Paralelamente, Washington presentó un proyecto
"revisado" de resolución sobre el desarme del régimen de
Saddam Hussein a Gran Bretaña, Francia, China y Rusia, los otros
cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la Organización
de Naciones Unidas (ONU).
En
conferencia de prensa en la Casa Blanca, Bush señaló que
"hemos intentado con la diplomacia. Estamos tratando así una vez
más. Creo que nosotros, los que vivimos en libertad, podemos desarmar
pacíficamente a este hombre (Hussein) si nos lo proponemos.
"Pero si no es así, tenemos la voluntad y el deseo,
como lo tienen otras naciones, de desarmar a Hussein."
Aclaró que su gobierno mantiene la política
de buscar un cambio de régimen en Irak, pero señaló
que si Hussein cumple todos los pedidos de desarme realizados por la ONU
"eso mismo sería una señal de que el régimen ha cambiado".
Washington acusa a Bagdad de fabricar armas de destrucción
masiva y de vínculos con grupos terroristas, pero no ha presentado
pruebas al respecto. Hussein asegura que las imputaciones estadunidenses
son un pretexto para invadir Irak y apoderarse de sus yacimientos petroleros,
las segundas reservas de crudo del mundo.
Por lo pronto, Estados Unidos presentó un proyecto
"revisado" de resolución sobre el desarme de Irak a los otros cuatro
miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
El vocero del Departamento de Estado, Richard Boucher
indicó que el nuevo proyecto -basado en una dura propuesta presentada
a principios de mes por Gran Bretaña- prevé que "habrá
consecuencias" si Bagdad se niega a acatar las inspecciones a su armamento.
"En la revisión se tuvo en cuenta las ideas presentadas
por nuestros aliados durante las consultas. Hicimos algunos cambios para
alcanzar nuestros objetivos y ampliar el apoyo en el Consejo de Seguridad",
agregó.
Francia, Rusia y China se han opuesto a la propuesta inicial,
que contemplaba el uso automático de la fuerza contra Irak.
El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan,
vaticinó que la nueva resolución sobre Irak será aprobada
"en breve" y "contendrá las exigencias de la ONU a Bagdad".
Pero el gobierno iraquí reiteró que no aceptará
ninguna nueva resolución contraria a lo convenido hasta ahora con
el jefe de los inspectores de armas de la ONU, Hans Blix. "En relación
con las consultas que tienen lugar dentro y fuera del Consejo de Seguridad,
no vemos necesidad de una nueva resolución", señaló
un portavoz del gabinete iraquí.
Pero mientras Bush suaviza su lenguaje en momentos en
que Washington maniobra para lograr la nueva resolución, continúan
los preparativos militares. Según confirmó un vocero del
Congreso Nacional Iraquí, opositor a Hussein, el ejército
estadunidense entrenará en Estados Unidos por lo menos a 5 mil opositores,
a partir de noviembre. La fuente indicó que en caso de tener éxito
la operación podría ser ampliada a 10 mil hombres.
A su vez, el exiliado presidente de la asamblea suprema
de la revolución islámica de Irak, ayatola Mohammad Bagher
Hakim, declaró desde Irán que tiene información de
que Hussein "se prepara para contratacar con armas químicas" en
caso de una ofensiva estadunidense.
En tanto, con un rotundo "no" al recurso de las armas
y un pleno apoyo a las resoluciones de la ONU, concluyó en Roma
la tercera Cumbre Mundial de Premios Nobel por la Paz, presidida por el
ex líder soviético Mijail Gorbachov. Los galardonados, entre
ellos la guatemalteca Rigoberta Menchú y el argentino Adolfo Pérez
Esquivel, manifestaron en una declaración su rechazo al uso de la
fuerza para la solución de los problemas entre los países.
Por último, seis personas fueron arrestadas a las
afueras de la sede de la ONU en Nueva York poco después de que poco
más de 10 ciudadanos se manifestaran pacíficamente en rechazo
a una eventual guerra contra Irak.