Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 26 de junio de 2002
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Economía

MEXICO S.A.

Carlos Fernández-Vega

TRAS VARIOS DIAS DE expectación, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ratificó su decisión, en el sentido que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores deberá entregar al Instituto Federal Electoral -en un plazo de diez días hábiles- toda la información en torno a los dineros de los Amigos de Fox, con Lino Korrodi a la cabeza.

EL SOLICITO PRESIDENTE de la susodicha comisión ya dijo que sí, que no hay problema, que cumplirá con la orden girada, que entregará la ruta crítica que siguieron los dineros de los Amigos de Fox... pero que no lo hará en el plazo establecido por el tribunal porque no es la CNBV la que cuenta con la información, sino las instituciones bancarias involucradas en el teje y maneje de dichos recursos, a las que "ya fue solicitada".

HASTA ESTE PUNTO declarativo las cosas aparentemente van por el rumbo correcto. El problema, sin embargo, fue el remate que Jonathan Davis Arzac aplicó a su declaración: la información referida se entregará al Instituto Federal Electoral "a la brevedad o por entregas parciales".

LA "BREVEDAD" EN labios de un funcionario de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores es un arma extremadamente relativa y, en la mayoría de los casos, costosísima para efectos del erario nacional.

A FINALES DE MARZO pasado -casi tres meses atrás-, Jonathan Davis Arzac compareció ante una subcomisión de la Cámara de Diputados a cuyos integrantes les aseguró que la institución a su cargo presentaría querella contra todo aquel que hiciera uso "indebido" de información privilegiada en operaciones del mercado bursátil.

EN ESA OCASION, el presidente de la CNBV aseguró a los legisladores que "en breve" divulgaría una "lista de personas que están siendo investigadas por haber hecho uso indebido de información privilegiada" en dichas operaciones y que, de hecho, la Procuraduría General de la República, a cargo de Rafael Macedo de la Concha, ya había recibido 239 expedientes de "pillos y hampones" -del ámbito público y privado- a quienes se les documentó la comisión de ilícitos en contra del sistema financiero que opera en el país.

SE PODRIA PENSAR que el respeto del sacrosanto secreto bancario quedaría al discrecional juicio de las autoridades financieras, pero no. Davis Arzac aclaró en aquella ocasión que las querellas se presentarían con base en las modificaciones que el propio Poder Legislativo autorizó a la ley respectiva en abril del año pasado. Al aprobarse, la CNBV tiene facultades para publicar las listas de los presuntos responsables de hacer uso indebido de información privilegiada y exigir la aplicación de la ley. En contra de ellos, dijo el funcionario, "se va a proceder con todo rigor y conforme a la norma".

PERO SIEMPRE FALLA algo: para que alguien aparezca en estas listas "debió cometer un ilícito después de publicada la (modificación a la) ley", por lo que no todos los casos que tiene en su poder la Comisión Nacional Bancaria y de Valores van a ser incluidos en dicha relación, acotó el responsable de firmar los pagarés del Fobaproa.

SIRVA EL GENEROSO CHORO anotado líneas arriba para señalar que tres meses después del anuncio del presidente de la CNBV a los legisladores ("en breve se divulgará una lista de personas que están siendo investigadas por haber hecho uso indebido de información privilegiada"... etcétera, etcétera y más etcétera), los susodichos "pillos y hampones" gozan de cabal salud y, desde luego, del anonimato.

SI ALGUNA FRASE HAN pronunciado con generosa soltura los distintos personajes que a lo largo de las últimas dos décadas han presidido la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (antes de 1995 había un organismo para cada una de las actividades financieras) ha sido "en breve". "En breve", por ejemplo, se corrigieron los excesos de los banqueros que contribuyeron a la crisis de 1982: "en breve" se atendieron los reclamos de miles de inversionistas trasquilados y defraudados por los tiburones de la bolsa en 1987; "en breve" se documentaron y persiguieron los ilícitos cometidos por la nueva generación de banqueros bursátiles (šsaludos a la banda!), lo que motivó, entre otras muchas cosas, que 421 delitos prescribieran; "en breve" se denunció a los especuladores que, gozando de información privilegiada, acapararon Tesobonos en los días previos a los "errores de diciembre", echándose al bolsillo alrededor de 30 mil millones de dólares, pagados puntualmente por el gobierno de Ernesto Zedillo; "en breve", pues, se actuó en consecuencia contra las personalidades -públicas y privadas- que hicieron del Fobaproa su estercolero personal, a costillas de las arcas nacionales.

"EN BREVE", TAMBIÉN, agradeceré a Agustín Vargas Medina, reportero de la revista Proceso, su generosidad por haber utilizado (número 1338, páginas 10 y 11) ampliamente información publicada por La Jornada en julio-agosto de 1999 (Expediente Fobaproa), sin otorgarle el crédito respectivo.

Las rebanadas del pastel:


 

AUNQUE DERROTADOS, los ratoncitos verdes tienen su atractivo: el mayor grupo mexicano de medios de comunicación, Televisa, informó que busca obtener los derechos de transmisión televisiva de la selección mexicana de futbol para los próximos cuatro años, señala un despacho de Reuters. "Definitivamente la selección es muy importante para poder transmitirla en televisión abierta", dijo el presidente de Televisa, Emilio Azcárraga, en un almuerzo con integrantes del Club América, propiedad del consorcio. Televisa posee la mayor cadena de tv de México y ha ganado alrededor de 38 millones de dólares por la transmisión de los partidos del campeonato mundial de futbol, de acuerdo con analistas. Los derechos de la selección nacional pertenecen desde 1998 al Grupo Pegaso, del empresario mexicano Alejandro Burillo, quien es primo de Azcárraga. Burillo, ex accionista de Televisa, posee todos los derechos de comercialización y mercadeo de la selección mexicana: desde los derechos de transmisión televisiva hasta la venta del uniforme del seleccionado. El contrato con Grupo Pegaso concluye al término de la Copa Mundial de Corea y Japón 2002, aunque Burillo tiene la primera opción para renovar el acuerdo. "Para Televisa es muy importante tener esos derechos", dijo Azcárraga. De acuerdo con medios locales de prensa, Pegaso pagó 40 millones de dólares por los derechos de la selección mexicana en el periodo 1998-2002. Sin embargo, ahora, con el desempeño mejor de lo esperado de la selección en la Copa Mundial, la renovación por el periodo 2002-2006 podría rondar los 100 millones de dólares.

[email protected] / Fax: 55 45 12 53

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