TIEMPO DE BLUES

Raúl de la Rosa

La nostalgia del vinilo

Primera llamada

SI USTED LEE esta columna es porque de una forma u otra le interesa la música. Si es así, y tiene poco más de 20 años de edad, seguramente todavía compró discos de vinilo de 33 revoluciones por minuto (rpm), el llamado LP o long play. Los sencillos eran de 45 rpm e inclusive de 16 rpm. Sus abuelos fueron los de pasta, pesados pero muy frágiles, y que sólo contenían una pieza por lado; sus revoluciones por minuto eran 78.

HUBO BISABUELOS Y éstos nacieron -para ser exactos- el 12 de agosto de 1877, cuando Tomás Alva Edison introdujo al mercado el primer fonógrafo. En 1889 se pusieron a la venta las primeras grabaciones en disco. Más de un siglo de evolución en este asunto de los discos.

LA PRIMERA GRABACION de blues fue realizada por Mamie Smith en 1920 para el sello Okeh, con el que se abre y descubre el enorme mercado discográfico entre la población negra y, como consecuencia, la serie de discos raciales (Race Records) dirigidos a esta minoría.

DESDE ESE, LEJANO ya, año de 1877, cuando nacieron los primeros cilindros cubiertos de aluminio, pasando por los fonógrafos mecánicos (a los que había que darles cuerda permanentemente para que el sonido no cesara), llegamos a 1925, cuando aparecieron los primeros aparatos eléctricos que ofrecían una mejor calidad de reproducción y con éstos llegó la alta fidelidad, que la Columbia introdujo en 1948.

DURANTE LA PRIMERA Guerra Mundial, para inflamar de patriotismo a los combatientes o simplemente como entretenimiento, había un modelo portátil que se llevaba hasta las trincheras. Hoy día, cualquier niño con su radio portátil puede sintonizar cientos de frecuencias y llevar en un disquito de plástico hasta 400 piezas, colocarse sus audífonos y con su reproductor de CD tener una síntesis de la música del mundo.

Segunda llamada

ESTA NOTA LA complemento con un artículo de Soledad Vallejos, publicado el 29 de abril en el diario Página/12 de Buenos Aires Argentina, titulado El querido vinilo, y en el epígrafe dice: "Pese a la fidelidad y la practicidad de los CD, hay quienes -y son muchos- no se resignan a hacer a un lado los viejos, delicados y aparatosos discos de vinilo. Objetos de culto, fetiches culturales, los discos siguen teniendo sus fans".

ESTO ES CIERTO, Ƒcuántos de ustedes, lectores, conservan esos viejos discos de larga duración? Puedo asegurar que si son aficionados al blues o al jazz o a la ópera o la música clásica o al rock o a... etcétera, guardaron, si no todos, si los discos más apreciados. Son los incunables de la música (guardada toda proporción) aunque no son esos libros que se hicieron desde el invento de la imprenta hasta inicios del siglo XVI; estos discos no se pueden reproducir ya, las matrices están destruidas o desaparecidas.

ERNESTO ASSANTE, EN clarín.com, publicó el mismo día, 29 de abril: "El CD está cada día más cerca de desaparecer" y de ahí transcribo: "Desde que se volvió compacto, el disco perdió gran parte de la fascinación que había tenido siempre. De un objeto de culto, fabricado en un delicado vinilo coleccionable que había que custodiar celosamente para evitar cualquier rayón, pasó a ser un pedacito de plástico, frío y sin alma, sin nada que valga la pena conservar."

NO SE PUEDE hablar con nostalgia de algo que no volverá, pero el futuro de la industria discográfica va a cambiar, pero por otras razones, que las meras sentimentales, hacia los discos de vinilo. De eso escribiremos pronto.

Tercera llamada

HACE UNAS SEMANAS, en un e-mail que recibimos, se nos decía que: "supongo que conocerás del disco que estoy hablando, pues has de tener una colección de discos de blues grandísima", antes de contestar me paré y fui al estante donde conservo todos mis discos de blues, me refiero a los elepés, y descubro que no, mi colección no es grandísima, alrededor de 250 discos, eso sí, sólo de blues; en cuanto a los CD, serán un poco más de 150 compactos, lo que significa que nunca voy a tener en compactos mis discos de vinilo.

EN LO PERSONAL, Ƒcomo podría deshacerme de discos que en sus portadas tienen dedicatorias de músicos hoy considerados leyendas y muchos más que no son (aún) pero que son amigos entrañables? Sé que ocupan un gran espacio, que no son fáciles de operar, pero son mis incunables del siglo XX, son mi gran tesoro, aparte de los recuerdos y las vivencias que disfruté con todos ellos, no tienen precio (los discos y las vivencias).

ƑQué escuchar?

RECIBIMOS DEL MULTIFORO Alicia dos discos (se entiende que son compactos) con grabaciones realizadas en dicho foro y en estudio, con los grupos de blues que regularmente tocan en ese lugar. Ambos están bien producidos y son un buen ejemplo del blues contemporáneo que se interpreta en México. El primero se titula: Bluesoloblues, y participan tres grupos: Años Blues -con Juan Pablo Alcaraz, Salvador Arceo, ALX Di la Rosa y, en la voz, Maricarmen Velásquez (extraordinaria, por cierto)-, Chivo Azul (buenos jóvenes bluseros) y Delta Sur. De los tres haremos un artículo proximamente. El segundo disco es sólo del grupo Años Blues, el cual me gustó mucho. Aparte del Multi Foro Alicia (Av. Cuauhtémoc 91, col. Roma, Tel. 57 67 16 90) espero que se vendan en otros lugares.

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