Reta el líder ultraderechista a socialdemócratas
a demostrar que son menos racistas que él
Le Pen no ganará; Francia, vacunada contra
el extremismo: José Bové
Chirac obtendrá entre 76 y 81.5% de los votos,
y su rival entre 18.5 y 24%, señala encuesta
Llama el PC francés a no votar en blanco "para
no facilitar un mejor resultado" del fascista
AFP, REUTERS Y DPA
Paris, 4 de mayo. Más de 41 millones de
electores elegirán este domingo entre el presidente saliente Jacques
Chirac y Jean Marie Le Pen, candidato del Frente Nacional (extrema derecha),
cuya presencia en la segunda vuelta de las presidenciales causó
manifestaciones masivas en todo Francia.
La derecha y casi toda la izquierda llamaron a votar por
Chirac, lo que lo ubica en la mejor posición para ganar los comicios.
El abstencionismo, que alcanzó 28.4 por ciento
en la primera vuelta, es aún la gran incógnita del escrutinio,
lo mismo que el resultado del líder del Frente Nacional (FN), cuyo
electorado es particularmente difícil de conocer.
Ninguna
organización, salvo la de Arlette Laguiller, candidata trotskista
en la primera vuelta por el partido Lucha Obrera, recomienda el voto en
blanco o nulo.
Los votos en blanco o nulos que no cuentan "facilitan
un mejor resultado de Le Pen", advirtió el presidente del Partido
Comunista Francés, Robert Hue.
Por otra parte, Le Pen retó este sábado
a los líderes europeos de centroizquierda a demostrar que son menos
racistas que él.
Refiriéndose al plan del ministro del Interior
británico, David Blunkett, de enseñar a los niños
inmigrantes en colegios especiales para que no "inunden" los centros británicos,
dijo que pondría a prueba a Londres enviándole refugiados
actualmente acampados cerca de la entrada francesa al túnel del
Canal de la Mancha.
"Puedo decir que no soy más racista que el señor
(primer ministro Tony) Blair. Y si salgo electo le enviaré a toda
la gente que está en Sangatte y me demostrará, al aceptarla,
que es menos racista que yo", dijo a la cadena BBC.
Cientos de inmigrantes en busca de asilo se encuentran
en Sangatte con la intención de llegar al Reino Unido cada mes,
subiéndose en los trenes y camiones que atraviesan el canal, al
creer que las leyes de asilo son más indulgentes en Gran Bretaña
que en Francia.
Gran Bretaña ha pedido a Francia que refuerce las
medidas de seguridad en las terminales del túnel del canal y que
cierre el campo de refugiados de Sangatte para disuadir a los inmigrantes
indocumentados no deseados.
Judíos y antiglobalizadores
Le Pen, en otra entrevista con la televisión israelí,
señaló que los judíos de Francia "no corren ningún
riesgo" si él resulta elegido este domingo, y que "incluso tienen
interés en votar por mí".
Afirmó que ha "tomado posición de forma
extremadamente clara contra las agresiones antisemitas, en particular cuando
iban dirigidas contra lugares de culto", en referencia a los recientes
ataques antijudíos cometidos como consecuencia del conflicto en
Medio Oriente.
Mientras, el líder del movimiento antiglobalización
francés, José Bové, se mostró confiado en que
en la segunda vuelta de las elecciones Le Pen no conseguirá el buen
resultado que vaticinan algunas encuestas, ya que Francia "está
vacunada
contra el extremismo".
En declaraciones a Dpa, Bové afirmó: "no
es que la gente quiera
que Le Pen llegue a gobernar".
El supuesto "fenómeno Le Pen" -añadió-de
la primera vuelta "se explica en un voto de protesta ciudadana ante una
clase política caduca que ya no sabe transmitir su mensaje a la
sociedad".
Para Bové, líder de la Confederación
Campesina, fundada en 1987 y que cuenta con cerca de 40 mil miembros, es
necesaria una profunda y urgente transformación de los actuales
esquemas políticos en Francia, que considera están agotados.
En este contexto, el escritor pe-ruano Mario Vargas Llosa
responsabilizó parcialmente a la izquierda por el éxito electoral
que logró el candidato de extrema derecha del Frente Nacional.
En un artículo que publicará este domingo
el diario alemán Welt am Sonntag, opina que la campaña
contra la globalización internacional y la integración mundial
es una muestra de "lo retrógrada" que puede llegar a ser la izquierda,
en especial la francesa.
No es casual que muchos votantes de los sectores obreros
que tradicionalmente optaron por la iz-quierda, esta vez hayan dado su
sufragio a Le Pen, afirmó.
Mientras, el líder ultranacionalista ruso Vladimir
Zhirinovski indicó que la presencia de Le Pen en la segunda vuelta
electoral en Francia muestra "un progreso de la extrema derecha en todo
Europa" y la desaparición de la iz-quierda. "Aunque Le Pen no gane,
ya es una gran victoria", expresó.
Zhirinovski, durante una manifestación en Moscú,
declaró que espera que la extrema derecha llegue algún día
al poder en Rusia.
Así las cosas, un sondeo publicado este sábado
por el periódico suizo La Tribuna de Ginebra refiere que
Jacques Chirac obtendría entre 76 y 81.5 por ciento de los sufragios,
contra 18.5 a 24 por ciento de Jean Marie Le Pen.
El ultraderechista incita a los franceses a
una campaña xenófoba de delaciones
Un eventual triunfo de Le Pen desataría una
cacería de inmigrantes indocumentados
YURIRIA ITURRIAGA CORRESPONSAL
Paris, 4 de mayo. Una pareja de refugiados políticos
cingaleses, con sus cuatro hijas pequeñas, ocupa dos cuartos con
cocina y baño; dos jóvenes hermanos de ella llegan de su
país y se alojan allí durante más de un año,
pero una madrugada se presenta la policía francesa, comprueba la
identidad de cada uno y ordena que los dos muchachos salgan y busquen otro
alojamiento porque está prohibida la promiscuidad, fuente de traumas
infantiles y de conductas antisociales en los adolescentes.
Es evidente que algún vecino los delató.
Y éste y la policía tienen la convicción de actuar
por el bien de esos extranjeros. Según sus propios parámetros
y buena conciencia.
Si
Le Pen es elegido presidente de Francia, y aun si el saliente primer ministro
so-cialista Lionel Jospin decidiera sucederse a sí mismo aceptando
la oferta que piensa hacerle el líder ultraderechista, lloverán
en las comisarías las denuncias contra inmigrantes en situación
irregular, cuya lista se verá alargada en la misma medida que un
extranjero represente una molestia, real o imaginaria, para un ciudadano
francés.
Y no necesariamente este ciudadano será un renegado
de la revolución francesa, la república y los derechos del
hombre; ni un ignorante de que en el ser francés están
incorporados ciudadanos y perseguidos de muchos otros países, desde
hace dos siglos para no ir más atrás, ni podrá negar
que la república salió a integrar extranjeros con
la política de expansión de sus fronteras hacia tres continentes
más y que los miles de hijos que perdió en las dos grandes
guerras fueron remplazados por naturales de sus ex colonias para las tareas
más ingratas.
Tampoco negará obcecadamente que las ejemplares
conquistas sociales y laborales del siglo XX en Francia las logró
una clase trabajadora multirracial, y hasta es posible que admita
que, cuando estas conquistas parecían haber alcanzado cierto punto
de equilibrio entre el bienestar mínimo de los trabajadores y la
reproducción del capital, la llegada masiva de poblaciones expulsadas
de sus tierras por el hambre o la guerra, ambas como consecuencia de las
políticas económicas, incluyendo la venta de armas de los
países fuertes, entre los cuales Francia misma provocó la
ruptura del contrato social y empezaron los conflictos interculturales
en tierra francesa.
Y no necesariamente dirá lo contrario, porque un
ciudadano francés de buena conciencia puede ser claro u oscuro,
de ojos rasgados, azules o marrones, de origen magrebí, judío,
italiano, portugués, libanés o ruso, etcétera.
Conciencia obrera conservadora
Pero si, como sabemos, la vida material crea la conciencia
del hombre, no es de extrañarse que la clase trabajadora, obrera
y campesina francesa, una de las más acomodadas del siglo XX, posea
una conciencia conservadora (de este bienestar). Y que la desubicación
de fábricas para abaratar los costos laborales, el cierre de pequeñas
empresas incapaces de competir con los productos importados, la eliminación
de cultivos y criaderos no competitivos en el mercado no sean percibidos
por los afectados como efectos perversos de la mundialización económica,
representada por la Organización Mundial de Comercio, pese a tener
a José Bové en casa. Y es que esos son enemigos abstractos
contra los que un ciudadano de buena conciencia nada puede hacer.
Cualquiera sea su origen étnico y color, el pequeño
y mediano empresario que a causa de las altas contribuciones al Estado
se arruina progresivamente, maldice el salario mínimo de inserción,
a cuyo financiamiento contribuyen y con el que el joven desempleado compra
droga y el más viejo alcohol, sin necesidad de ir a buscar el cheque
mensual de alrededor 3 mil 800 pesos mexicanos que les llega a su propio
buzón. Así como los jubilados, sin distinción de religiones,
a cu-yos edificios fueron llegando familias con otras costumbres y cocinas
de otros olores, y voces sonoras como para hacerse oír a través
de la maleza o el desierto, las rechazan porque hay "largos" adolescentes
oscuros, agrupados en la propia acera, que les imponen miedo.
Y como los padres y madres cuyos hijos, escolares de suburbio,
pierden la chamarra, la mochila o los tenis finos en manos de sus mayores
prematuramente amafiados. Y las profesoras y algunos maestros de secundaria
y preparatoria de colonias marginales que han sufrido alguna agresión
verbal o física de sus alumnos y sueñan con el retorno del
respeto.
Muchos de ellos, y otros que no lo confiesan en las entrevistas,
si logran llevar a Le Pen este domingo a la presidencia constituirán
el más temible y subrepticio ejército xe-nófobo. Y
sin perder su buena conciencia.
Sus comentarios han horrorizado a Europa
Proclama la desigualdad de las razas y niega ser antisemita
REUTERS
Paris, 4 de mayo. El dirigente ultraderechista Jean Marie Le Pen sorprendió a Europa al pasar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Francia, que se disputará este domingo, con una plataforma antieuropea y antinmigrante.
El ex paracaidista de 73 años dijo una vez que el Holocausto nazi era un detalle de la historia y abiertamente proclama la desigualdad de las razas, aunque niega ser ra-cista o antisemita.
Las encuestas de opinión pronostican que el presidente conservador Jacques Chirac se adjudicará una cómoda victoria ante Le Pen, con alrededor de 80 por ciento de los sufragios.
A continuación algunos de los comentarios más controvertidos del líder del Frente Nacional, citados por medios de prensa y grupos de interés.
Aborto
"La idea de que tu cuerpo te pertenece es totalmente irrisoria. Pertenece a la vida e, igualmente, a la nación". (1996)
Electorado
"Si todos los esposos engañados en Francia votaran por mí, obviamente algún día sería presidente de la república". (1998)
Sida
"Los portadores de sida están sudando el virus por sus poros, lo que pone en cuestión la estabilidad de la nación (...) Puede ser transmitido por el sudor, la saliva, el contacto. Es un tipo de lepra". (1987)
Defensa contra acusaciones de racismo
"Escuchen. Mi personal doméstico es negro, mi cocinera es negra... ƑQué quieren que haga? ƑQue me case con un ho-mosexual negro con sida?". (2002)
"El manifiesto del Frente Nacional no es extremista en absoluto. Cumple con las demandas del humanismo clásico y está basado en las virtudes tradicionales de fraternidad y justicia". (1993)
Dictadura
"Es necesario tener la posibilidad de una dictadura al estilo romano en caso de que haya una catástrofe". (1984)
"ƑCreen ustedes (...) que a mi edad voy a convertirme en un dictador?". (2002)
Europa
"Soy partidario de una Europa de naciones, una Europa de patrias, pero soy un adversario decidido de una Europa supranacional y federativa". (2002)
Holocausto
"No digo que no hayan existido las cámaras de gas. Yo no las vi por mí mismo. No he estudiado ese asunto en particular. Pero creo que es un detalle en la historia de la Segunda Guerra Mundial". (1987; Le Pen fue condenado y se le ordenó pagar una multa simbólica de un franco por esta declaración).
"Los jóvenes necesitan pureza (...) Desde ese punto de vista, las SS hitlerianas, con su uniforme, son algo así como el sacerdote en su sotana". (1969)
Inmigración
"La hegemonía del mundo islámico-árabe (...) está colonizando progresivamente nuestro país". (1984)
"Este preocupante fenómeno nos impone sus costumbres, sus hábitos, sus religiones y nos está robando nuestra alma (...) la oleada de inmigración nos sumergirá después de arruinarnos". (1996)
"Si tenemos que establecer campos de internamiento, instalaremos campos de tránsito donde (los inmigrantes ilegales) puedan esperar con relativa comodidad pa-ra regresar a casa". (2002)
Desigualdad de las razas
"Sí, yo creo en la desigualdad de las razas (...) Noto que las razas son desiguales. Es una banalidad". (1996)
"Las diferentes razas fueron creadas por Dios (...) Es lo mismo para los hombres como lo es para los perros". (1984)
Sexualidad
"No me entusiasma la idea de muchachos árabes acostándose con chicas de Estrasburgo". (1987)
Deportes
"Encuentro artificial hacer que vengan jugadores extranjeros y jueguen en Francia y los bauticen en el equipo francés (...) La mayoría de los jugadores franceses ni siquiera se saben, o no quieren cantar La Marsellesa". (1996)