En seis de cada 10 familias de esta capital se reportan casos de maltrato infantil, aseguró la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos local (CDHDF), Nasheli Ramírez Hernández, quien recalcó que ese ambiente de violencia afecta no sólo el sano desarrollo de niños, niñas y adolescentes, sino también el tejido social.

Durante su intervención en la presentación del libro Educación en el siglo XXI, del investigador universitario Mario Waissbloth, en entrevista la ombudsman se manifestó en favor de establecer un marco legal eficaz que detenga el problema, pero también pugnó porque se consolide un sistema público de protección a la familia, que hoy se carece y que ayudaría a la contención del maltrato infantil.

Criticó el hecho de que en Ciudad de México una persona puede enfrentar prisión si maltrata a un animal, pero hay mucha gente que golpea a sus hijos bajo la lógica de que así los educan y no merecen sanción alguna, aunque afecten a los menores.

En el acto –patrocinado por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso)– Ramírez Hernández mencionó que ese tipo de conductas son muy persistentes, sobre todo cuando hay padres o madres que viven una situación de estrés tóxico continuo debido a las agotadoras horas de trabajo y de traslado a casa, con malos salarios, con el temor constante de ser asaltado en el transporte público o en la calle y más aún cuando tienes un gobierno ausente en cuanto a lo que tiene que estar apoyando.

La titular de la CDHDF detalló que se han incrementado las denuncias de violencia, pero de maltrato a las mujeres, en particular, aunque generalmente no hay denuncias en torno al maltrato infantil, a menos que veamos cosas que son las que se reportan ya en los extremos: el problema está ahí, pero parece ser invisible.

–¿Entonces las denuncias de ese tipo que llegan a la Procuraduría de Justicia capitalina no reflejan las cifras reales?

–No, naturalmente, ni las que se tienen en la Procuraduría de la Defensa del Niños y Adolescentes, que tenemos hoy por parte del DIF ni en esa dependencia.

Citó el ejemplo de que si en el DIF se reciben 100 quejas, después de la investigación queda la mitad en los que sí está probado que hay maltrato infantil, “y para que pruebes que así fue es porque realmente los niños están muy, muy maltratados. De esa mitad sólo 10 por ciento realiza la demanda judicial.

Durante la presentación, Waiss-bloth, Ramírez y el investigador Juan Fidel Zorrilla y Gloria del Castillo, directora de la Flacso, resaltaron la necesidad de mejorar los esquemas educativos para enfrentar ese problema que se vive no sólo México, sino en Latinoamerica.