Opinión
Ver día anteriorViernes 11 de noviembre de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
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México SA

Dólar aumenta a 21 pesos

Primera llamada, primera

El huracán apenas comienza

C

omo aquí nunca pasa nada y, además, el aumento en la volatilidad ha sido asimilado de manera ordenada (Hacienda dixit), el tipo de cambio peso-dólar trepó ayer a un nuevo máximo histórico: 21 bilimbiques por billete verde (21 mil sin el truco de los tres ceros), de tal suerte que la devaluación acumulada durante la estancia de Enrique Peña Nieto en Los Pinos alcanza 61.54 por ciento, y contando, porque el huracán Trump apenas comienza.

Y como el país tiene muchas balas para dar la pelea (Banco Mundial dixit), todos los indicadores de la Bolsa Mexicana de Valores se desplomaron. El principal de ellos, el de precios y cotizaciones, cayó 4.75 por ciento, pero las acciones de cinco fondos y corporativos reportaron descensos de entre 10 y 11.65 por ciento, entre ellos Alsea, Rassini y Grupo Carso 9.93, este último de Carlos Slim.

En fin, el huracán categoría 5 (pronosticado por el meteorólogo Agustín Carstens, mientras José Antonio Meade todo lo veía rosa) apenas comienza, y junto a él los pronunciamientos y posicionamientos de los expertos en la materia, como en el caso del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic), para el cual el resultado electoral en Estados Unidos deja un mensaje muy claro: México debe asumir la conducción de su desarrollo económico; la responsabilidad del porvenir de nuestra nación es propia, no se encuentra en la esperanza de inversiones foráneas que no llegan a todas las regiones y sectores productivos de nuestro gran país; sólo a través de una planta productiva nacional altamente competitiva se puede lograr el fortalecimiento del mercado interno, y con ello alcanzar mayores niveles de progreso social.

México, pues, debe abandonar su cómoda posición de alimentarse con las migajas que le avientan desde Estados Unidos y encontrar su propio motor de crecimiento. Como señala el Idic, sin negar la relevancia de la interacción global, particularmente con el principal socio económico de nuestro país, es prioritario reconocer que el mundo está cambiando, Gran Bretaña y España ya habían enviado una señal del agotamiento del modelo globalizador que no atiende las condiciones laborales y empresariales de cada nación.

Por ejemplo, apunta el citado instituto, México es uno de los principales actores en las exportaciones, pero lo hace desde una base maquiladora, con bajo valor agregado y escaso contenido nacional. De acuerdo con el Inegi y su programa Immex, 75 por ciento de los insumos que utilizan las empresas manufactureras ahí registradas es importado; apenas una cuarta parte es generado en el país. Lo anterior es producto de haber implementado un modelo de apertura económica que fomenta la inversión extranjera y que no le da el mismo trato a la parte nacional. Eso explica la disparidad en el desarrollo regional y el bajo crecimiento del país.

México, pues, debe destetarse de Estados Unidos y dejar atrás el sueño del desarrollo compartido con el vecino del norte, que en los hechos ha sido una pesadilla de falta de crecimiento y creciente pobreza, todo ello ahora aderezado con la explícita amenaza de Donald Trump, quien no dudará de pasar a los hechos una vez instalado en la oficina oval.

Sobre este punto el Idic resalta que como nunca antes México fue el centro de los posicionamientos de la contienda por la presidencia de la primera potencia del orbe, y en consecuencia habrá que entender que existirán cambios en la relación entre ambos países. Debemos anticiparnos con una política de desarrollo económico e industrial competitiva que mantenga los lazos hacia el exterior, pero que priorice el fortalecimiento de la estructura productiva propia. La victoria de Trump tuvo como plataforma, en materia económica, el cuestionamiento de los beneficios que la apertura comercial le ha generado a la población estadunidense, y en términos generales puede entenderse que el descontento fue mayor.

En el fondo, subraya el instituto,se tiene un segundo mensaje que México debe atender: Estados Unidos impulsará estrategias que velarán por sus intereses y que pueden llegar a tener tintes proteccionistas. Si bien debe privilegiarse el ánimo sereno, es evidente que habrá cambios. México debe prepararse para ello. Y el camino es claro: debemos elaborar un proyecto de nación que priorice el incremento del valor agregado de la producción nacional; eso se logra a través de fortalecer los encadenamientos productivos propios.La competencia global requiere que el incremento de la innovación y el progreso tecnológico sean parte de la estrategia, es la única forma de crear las ventajas competitivas que superen a las ventajas comparativas de nuestros principales competidores. De igual forma es el mecanismo para hacer más robustos los nexos con nuestros socios comerciales.

El fomento a la inversión privada nacional y el incremento de la eficacia en el gasto de gobierno deben acompañarse, pues es imprescindible elevar su sinergia. Parte de ello se logra aumentando el contenido nacional de las compras de gobierno, subraya el Idic. De poco sirve tener un presupuesto público que alcanza 4.9 billones de pesos si su ejercicio termina favoreciendo mayoritariamente las importaciones. Debemos actuar con ánimo sereno, pero con claridad: evitar especulaciones que solo debiliten la posición financiera de México es una prioridad, sin embargo, también lo es comenzar a trabajar, como sociedad, en la construcción de un nuevo modelo de nación, socialmente incluyente y de competitividad basada en la productividad. Pensamos que la responsabilidad del porvenir está en las manos de todos los ciudadanos de nuestra gran nación.

A pesar de las evidencias de que las cosas se ponen color de hormiga, en el gobierno peñanietista mantienen el discurso de las fortalezas y la solidez de los fundamentos, al tiempo que evitan reacciones prematuras que se adelanten a hechos que ahora desconocemos (Meade-Carstens dixit). En cambio, en otras latitudes hasta el menos enterado ya se puso la gabardina y sacó el paraguas.

Las rebanadas del pastel

Mediáticamente muy oportuno el encarcelamiento de Guillermo Padrés por defraudación fiscal y operaciones con recursos de procedencia ilícita, pues se registra justo cuando aumenta la intensidad del huracán. Según suba de tono el Trumpazo se irán dando otros enchiqueramientos (tal vez Javier Duarte, aunque en su caso la membresía tiene sus PRIvilegios) u otras noticias escandalosas para desviar la mirada y seguir presumiendo que vamos por el camino correcto.

Twitter: @cafevega