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Comienza temporada de Terminal (Axolotl), obra de Diego Álvarez, en el Museo del Chopo

Extrapolan la extinción del ajolote a la pérdida de identidad en los jóvenes

Somos hijos de una generación de divorcios, de personas que ya no creen en el amor, dice

Foto
Aldo González y Sofía Sylwin en una escena de Terminal (Axolotl), primera parte de la trilogía que el dramaturgo y director Diego Álvarez culminará el próximo año con el estreno de Pasión terminalFoto cortesía de la compañía Principio
 
Periódico La Jornada
Viernes 1º de agosto de 2014, p. 4

El dramaturgo y director de escena Diego Álvarez Robledo (DF, 1986), asegura que las nuevas generaciones tienen el grado más alto de estudios, pero también enfrentan el índice más grande de desempleo, así que no creen en nada y empiezan a proceder desde esa desesperanza.

En el montaje Terminal (Axolotl), que iniciará temporada este viernes en el Museo Universitario del Chopo, Álvarez utiliza como metáfora la extinción del ajolote para hablar de la pérdida de identidad en los jóvenes, de la falta de fe en la sociedad, en el amor, en la familia y en los valores tradicionales.

“Siento que los jóvenes de 22 o 23 años hasta cierto punto no tienen fe en la sociedad, en la política, en el sistema económico. No hay fe en el amor o la familia, y ese es el estado que denuncia Axolotl”, señala en entrevista el dramaturgo.

Suicidio y violencia doméstica

Terminal (Axolotl), primera parte de la trilogía Terminal, ganadora del Premio Nacional de Dramaturgia Joven Gerardo Mancebo del Castillo 2011, explora temas relacionados con los jóvenes y su entorno: el suicidio, la sobrepoblación en la ciudad y la violencia doméstica, así como la pérdida de identidad en la era de las nuevas tecnologías.

“La obra –explica el dramaturgo– señala la identidad en la era de las redes sociales, porque tenemos una sobredosificación de información y en todos lados nos encontramos con imágenes, sonidos y situaciones difíciles de procesar, pero también está la posibilidad de fugarte a otro tipo de realidades por medio de juegos, de redes en Internet, de la televisión misma.”

El proyecto surgió a partir de una serie de sucesos ocurridos en 2010 sobre personas cercanas a los integrantes de la compañía Principio. Fue un momento en que la tasa de alcoholismo en los jóvenes era muy alta, al igual que la de suicidios.

Después de su estreno, en 2012, Álvarez considera que los temas de su obra siguen vigentes. “La juventud vive al día, no para construir una vida con cierta estabilidad, sino para lo que va a consumir de inmediato. Vivimos un momento en el cual todo lo que conocemos es desechable y se termina.

Somos hijos de una generación de divorcios, así que es una generación que tampoco cree en el amor; las garantías sólidas sobre las cuales nuestros padres construyeron su vida para nosotros ya no existe.

Terminal (Axolotl), la primera investigación escénica de la compañía Principio, relata la travesía de cuatro jóvenes, por medio de diferentes caminos para llegar a Xochimilco buscando en el ajolote la fuerza y la esperanza para seguir adelante.

Oda a la ciudad de México

Diego Álvarez Robledo utiliza la figura del ajolote mexicano, mítico anfibio que fue víctima de la urbanización de la ciudad y que se encuentra en extinción, para retratar a una juventud que sobrevive a distintos modos de extinción.

Axolotl es la primera parte de la trilogía, la segunda se llama Intersticios, que ya tuvo dos temporadas, y la tercera, Pasión terminal, se estrenará en el verano de 2015.

“Toda la trilogía versa sobre el tema de la juventud en la ciudad de México. Terminal es una oda a la ciudad y a la juventud en cierto sentido y desde distintas perspectivas”, afirma el dramaturgo.

Con las actuaciones de Giovanni Gamba, Nara Pech, Aldo González y Sofía Sylwin, Terminal Axolotl se escenifica hoy y el 8 de agosto, a las 20 horas; sábados 2 y 9, a las 19 horas, y los domingos 3 y 10, a las 18 horas, en el Museo Universitario del Chopo (Dr. Enrique González Martínez 10, colonia Santa María la Ribera).