El investigador, filólogo y narrador Eduardo Jiménez Mayo, en el libro El evangelio según Juan de Mairena, escudriña las ideas cristianas en la extensa prosa machadiana recogida en Juan de Mairena como obra y heterónimo.

El autor recuerda que Antonio Machado dijo que Juan de Mairena era su yo filosófico, que en esencia tenía la finalidad de reflexionar sobre todo lo que el poeta no quería o no podía abordar desde su vocación lírica.

La primera aparición en periódicos de la firma de Juan de Mairena fue en 1934, dentro de una serie de artículos en las que aparece en tono juguetón, satírico y socrático. En esta época, Machado encontró en la prosa periodística el medio más adecuado para sus propósitos.

A partir de lo que Machado entendía y proponía con Mairena en el desarrollo de una prosa filosófica, Jiménez Mayo examina la forma en que el poeta trata su cristianismo como parte inherente de su obra.

El filólogo documenta cómo la figura de Mairena permite a Machado el ejercicio de la política sin máscara y de la filosofía militantes. Machado se libera del verso, y con De Mairena como alter ego, se entrega al pensamiento filosófico, lo que el autor denomina un cristianismo laico.

La clave para descifrar el pensamiento religioso machadiano, evidencia Eduardo Jiménez, es su libro Juan de Mairena, aunque el protagonista de ese texto no sea directamente Machado, sino su doble.

Para Juan Domingo Argüelles, autor del prólogo del libro, Jiménez reactualiza a Antonio Machado y a Juan de Mairena: los pone, de nuevo, en el centro de la discusión necesaria ya no sólo sobre el futuro de España y de Europa, sino sobre el presente y el devenir de la humanidad.

Título: El evangelio según Juan de Mairena

Autor: Eduardo Jiménez Mayo

Editorial: Cal y Arena

Número de páginas: 122

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