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Firma acuerdo para la supervisión del programa nuclear de la república islámica

Irán aprueba el acceso de inspectores de la AIEA a reactor nuclear y mina de uranio
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Alí Akbar Salehi, jefe del organismo de energía atómica de Irán (a la izquierda) y Yuyika Amano, titular de la Agencia Internacional de Energía Atómica, ayer en Teherán, donde firmaron un pacto de cooperaciónFoto Xinhua
 
Periódico La Jornada
Martes 12 de noviembre de 2013, p. 22

Teherán, 11 de noviembre.

El gobierno de Irán aprobó dar acceso a inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) al reactor nuclear de Arak y a la mina de uranio de Gachin, en el contexto de un acuerdo de cooperación que establece una plan de ruta para supervisar que el programa iraní de desarrollo atómico no incluya proyectos bélicos.

El jefe del organismo nuclear iraní, Alí Akbar Salehi, hizo el anuncio al final de una reunión con el jefe de la AIEA, Yukiya Amano, quien informó que aunque el documento firmado este lunes no incluye una visita a la base militar iraní de Parchin, la posibilidad de una inspección no está descartada y será discutida próximamente.

La visita a Parchin, en la periferia sureste de Teherán, es vista como uno de los aspectos claves en la inspección de la docena de instalaciones de investigación y desarrollo nuclear iraníes. Esto incluye al menos dos plantas de enriquecimiento de uranio en las localidades de Natanz e Isfahan, ambas al sur de la capital de Irán, así como el laboratorio de Arak, en la zona este del país.

Amano consideró que la visita a Parchin es importante, pero destacó que el acuerdo signado hoy constituye una primera fase para restablecer la confianza con Irán, mermada a raíz de las dudas que plantean Israel y las potencias con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Rusia y China), más Alemania, sobre las intenciones militares de Irán.

La última vez que inspectores de la AIEA estuvieron en Parchin fue en 2005, cuando comenzaba el diferendo diplomático entre las potencias e Irán por su programa de desarrollo nucleoeléctrico.

Aunque Amano no expresó las razones concretas de la visita de Parchin, fuentes del organismo han expresado su sospecha de que en esa base se han realizado explosiones atómicas.

El nuevo acuerdo permitirá a los inspectores acudir a Arak, donde se construye un reactor nuclear que usa un tipo diferente de refrigerantes que el agua y produce mayor cantidad de productos derivados del plutonio que los reactores convenciones de agua pesada.

La AIEA visitará también la mina de uranio de Gachin, cerca del puerto de Bandar Abbas, en la costa iraní del golfo Pérsico.

Otro de los avances logrados es el relativo a la actualización de informes sobre todos los reactores de investigación que posee Irán, lo cual es relevante porque esas instalaciones usan uranio enriquecido al 20 por ciento, el mayor nivel que Irán ha reportado hasta ahora.

Detener el enriquecimiento al 20 por ciento es un objetivo primordial de las potencias atómicas porque un mayor nivel permitiría a Irán la generación de material nuclear con fines militares, según expertos en la materia.

Hay que fijar disposiciones para que ese reactor (de Arak) no pueda ser activado como está previsto y no pueda producir la bomba atómica, afirmó el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Laurent Fabius, quien admitió que las negociaciones inconclusas de la semana pasada con Irán están directamente relacionadas con la falta de un acuerdo en torno a la planta situada al sureste de Teherán.

No estamos lejos de un acuerdo con los iraníes, pero todavía no hemos llegado, porque hay dos o tres puntos que plantean dificultades, dijo Fabius, tratando de persuadir a la opinión pública internacional de que las negociaciones de la semana pasada no fueron un fracaso.

También el secretario estadunidense de Estado, John Kerry, intentó atenuar las versiones sobre el estancamiento en las negociaciones con Teherán y un eventual desacuerdo de Francia con Alemania y las otras cuatro potencias atómicas.

Kerry indicó que la ausencia de un pacto el fin de semana en Ginebra se debió básicamente a que los delegados iraníes no pudieron en ese momento aprobar el documento final, pero expresó su confianza en que se alcance un acuerdo en la disputa en los próximos meses.