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El final puede concretarse en la próxima legislatura: fuentes abertzales

ETA condiciona su disolución: legalizar el partido Sortu y garantías para los presos
 
Periódico La Jornada
Martes 23 de agosto de 2011, p. 24

Madrid, 22 de agosto. ETA condiciona su disolución a que se legalice el partido abertzale (nacionalista) Sortu y a que tenga garantías sobre el futuro de los presos etarras, lo que previsiblemente se logrará en el gobierno que surja de las elecciones generales de España adelantadas al 20 de noviembre por el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló hoy el diario El País, que citó a fuentes de la izquierda abertzale.

El final definitivo de ETA se materializará, previsiblemente, en la próxima legislatura, indicaron las fuentes, las cuales consideraron que el grupo armado emitirá antes de los comicios un nuevo comunicado en el que reafirmará su apuesta por la tregua que anunció en enero.

ETA condiciona su final a la legalización del partido Sortu, que surgió a principios de año en el seno de la izquierda abertzale y que fue prohibido por el Tribunal Supremo español pese a ser la primera formación de este entorno en rechazar explícitamente la violencia etarra.

El Tribunal Constitucional español tiene pendiente decidir sobre un recurso contra la proscripción de Sortu, pero no parece probable que lo vaya a hacer antes de los comicios.

Además, y según las mismas fuentes citadas por El País, ETA pone también como condición para concretar su disolución, garantías del gobierno español sobre el futuro de etarras encarcelados.

El grupo armado anunció en enero un alto el fuego general y verificable, pero lleva más de dos años sin matar en España y sin cometer atentados en suelo español. La organización, responsable de la muerte de 800 personas en 50 años, se encuentra muy debilitada, según expertos de la lucha antiterrorista.

Ha dejado de cobrar el llamado impuesto revolucionario, extorsión exigida a los empresarios del País Vasco y la vecina Navarra que le servía de importante fuente de financiamiento. Y su sector político exige cada vez más fuerte el final de la violencia etarra.

Arnaldo Otegi, quien fue vocero de la proscrita Batasuna (unidad), señalada por Madrid como brazo político de ETA, aseguró el pasado 7 de julio que la estrategia militar del grupo armado sobra y estorba. En el último día de un juicio contra él, defendió que la apuesta de la izquierda abertzale por las vías pacíficas y democráticas es irreversible e irrevocable.

La izquierda independentista consiguió el pasado 22 de mayo sus mejores resultados electorales. La coalición Bildu –formada por los partidos Eusko Alkartasuna y Alternatiba, junto a independientes procedentes de la ilegalizada Batasuna– se convirtió en la primera fuerza por número de concejales y en la segunda por votos en el País Vasco.

Entre otras alcaldías, conquistó la de San Sebastián.