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Convocaron a Jonathan Orozco, del Monterrey, para ocupar el lugar vacante de portero

Jesús Corona, fuera del Tri; le dan seis partidos de castigo

Chaco también fue suspendido seis encuentros; el técnico Enrique Meza, tres juegos a la congeladora, mientras que su colega Tomás Boy, cinco

Álvaro Dávila culpa al argentino

 
Periódico La Jornada
Martes 17 de mayo de 2011, p. a12

Pachuca, 16 de mayo. El portero Jesús Corona fue dado de baja de la selección para la Copa de Oro de la Concacaf, como consecuencia de los incidentes registrados casi al final del partido de semifinales del domingo entre Morelia y Cruz Azul, en el estadio Morelos, donde intervino el jugador. Pero eso no fue todo: la comisión disciplinaria lo suspendió seis encuentros, al igual que a su compañero Christian Giménez.

Un aficionado que ingresó a la cancha provocó una pelea, en la que Corona fue captado por las cámaras en el momento en que le daba un cabezazo en el rostro al preparador físico de Monarcas, Sergio Martín, quien también se llevó seis juegos de castigo.

Ante los hechos lamentables que se suscitaron en el partido Morelia-Cruz Azul, estábamos reunidos en el Centro de Alto Rendimiento, y al final del partido platicamos, analizamos, conversamos y deliberamos, y hemos tomado la determinación de no convocar a José de Jesús Corona para la Copa Oro como estaba previamente, informó Héctor González Iñárritu, director de selecciones nacionales.

El directivo, quien estuvo acompañado por el técnico José Manuel de la Torre, agregó que en su lugar fue llamado el arquero Jonathan Orozco, del Monterrey, que estaba en la lista preliminar.

Puntualizó que una de las partes importantes en la selección es la de los valores, de la responsabilidad social, de la no violencia. Es muy importante el aspecto deportivo, el de levantar trofeos, ganar la copa, pero también el del ejemplo hacia la afición y hacia la juventud, y hemos tomado esa determinación, dijo.

Esta es la segunda vez que Corona queda excluido de la selección; el año pasado se perdió el Mundial de Sudáfrica 2010 por haber participado de la riña en un bar.

Sin justificar lo hecho por Corona, el presidente de Cruz Azul, Guillermo Álvarez Cuevas, pidió que no se etiquete o estigmatice al portero y ofreció disculpas por lo acontecido en domingo.

Sin el ánimo de justificar a nadie, porque lamentamos muchísimo lo que ocurrió, además de la amargura de la eliminación, habría que analizar desde el arranque y no editar las imágenes que lo están inculpando, señaló Álvarez Cuevas, tras asistir a la asamblea de dueños de equipos.

Agregó que más allá de entender lo que signifique el respaldo y el apoyo a Jesús Corona por parte de la institución, sí hay que entender qué ocurrió cinco o siete minutos antes de haber agredido al preparador físico de Monarcas.

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El arquero Jesús Corona quedó al margen de la selección por segunda vez a causa de un problema extradeportivoFoto Juan Manuel Vázquez

En un comunicado, la Federación Mexicana de Futbol informó: Por La Máquina fueron seis los sancionados. Christian Giménez y José de Jesús Corona con seis partidos, por ordenar o por sí mismo agredir a un contrario o a un compañero en la cancha, accesos, pasillos o vestidores.

Los otros cuatro sancionados de los Cementeros fueron: el delantero Isaac Romo, el técnico Enrique Meza, el preparador físico Daniel Ipata y el doctor Alfonso Jiménez. Los tres primeros fueron castigados tres encuentros, mientras que el médico, dos.

Romo, por conducta violenta; Meza, por entrar al terreno de juego sin el permiso del árbitro; Ipata, un partido por faltar al respeto a los oficiales del partido y dos por entrar al terreno de juego sin permiso del árbitro; esta última falta la cometió también el doctor.

Morelia tuvo tres sancionados. Además del preparador físico, el delantero Miguel Sabah fue suspendido tres partidos, al ser culpable de conducta violenta, mientras el técnico Tomás Boy estará en la congeladora cinco encuentros. Dos por ordenar o intentar agredir o provocar en cualquier forma a jugadores de su mismo equipo o del equipo contrario, así como a integrantes del cuerpo técnico, y tres por entrar al terreno de juego sin el permiso del árbitro.

El presidente del Morelia, Alvaro Dávila, propuso analizar quién detonó la gresca. No estoy defendiendo a mis jugadores, al preparador físico ni a nadie. Estoy hablando de que los jugadores necesitan cultura para vivir momentos de tensión cuando se rompe la seguridad. Dijo que el aficionado que ingresó a la cancha le estaba pidiendo a Torrado que le diera la mano.

Aseguró que en España se meten aficionados todos los días, pero en Europa los jugadores se quedan tranquilos hasta que llegan los elementos de seguridad.

El dirigente, quien estuvo también en la reunión de Pachuca, piensa que tienen una gran seguridad y anunció que se reforzará en la final. “Se metió un aficionado a la cancha, parece que la capacidad de reacción de la gente de seguridad fue más lenta que el Chaco (Giménez), que estaba más cerca, y ahí yo siento que se detona todo”.