En la entrada al Deportivo Reynosa hay una manta blanca. El mensaje está escrito en letras rojas: Cuidado, hormigas unidas hacemos marabunta; en la calle de Matlacóatl, a un costado de la Unidad Habitacional Ferrería, se instaló un campamento de información y vigilancia que funciona las 24 horas.

Los ciudadanos que se oponen a la construcción del Foro Azcapotzalco saben lo que está en juego y conocen las limitaciones de su jefe delegacional: Enrique Vargas podrá llamar a una consulta, tendrá su posición como delegado, puede aparentar estar en contra del proyecto, pero las leyes son muy claras y él está imposibilitado a parar la obra.

Gloria Torres vive en Ferrería, se dice enojada por la postura del titular de la demarcación. Desde temprano realiza jornadas informativas, ayer le tocó en una de las entradas de la Alameda Norte y hoy visitará otros puntos de la demarcación: tenemos el derecho a defendernos, de rechazar el proyecto y si alguien está en favor de que se construya un foro de 55 mil personas para actos privados en un espacio público que lo diga, que lo defienda; pero lo que no puede hacer es mentir.

La información que les ha entregado el gobierno capitalino ha sido poca. Los vecinos aseguran que la estrategia que pretendía descalificar las acciones de protesta fueron revertidas y ya detectaron a las personas que fueron infiltradas por la delegación para reventar el movimiento.

En el otro extremo, de lado de la Universidad Autónoma Metropolitana, se encuentra la advertencia que refiere a una marabunta y si bien el accionar ciudadano no es una migración masiva de hormigas legendarias, que devoran a su paso todo lo comestible que encuentran, ya logró que los argumentos que en un principio manejó la autoridad se vinieran abajo por sí solos.

El jueves los ciudadanos acordaron con el gobierno capitalino entregar un listado de las personas que la asamblea designe como sus representantes, pues algunos que se presentaban en las mesas de trabajo carecían de representatividad y tenían línea de las autoridades. Los vecinos cuentan con el apoyo del presidente de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos, Manuel Fuentes.